Concejo de Bogotá aprueba la venta de ETB | El Nuevo Siglo
Martes, 24 de Mayo de 2016

 Con 11 votos a favor y 4 en contra, el Concejo aprobó anoche, en primer debate, la venta de la Empresa de Telecomunicaciones de Bogotá (ETB)

 

Este es el panorama de la empresa:

1. Es una competencia de gigantes El mercado de las telecomunicaciones en Colombia se ha concentrado en tres grandes multinacionales. Y al lado de ellas trata de competir la ETB. El número de suscriptores que cada una tiene en el continente habla por sí solo: Claro: 365 millones de suscriptores. Movistar: 322 millones. Tigo: 56 millones. ETB: 1,4 millones. En ese mercado no tiene nada que hacer, sola, una empresa del tamaño de la ETB. Y menos si es pública. Es imposible competir. Hoy, el 94% de los ingresos de las telecomunicaciones en Colombia están en manos de Tigo, Movistar, Claro. EPM, por ejemplo, se dio cuenta que no podía competir en telecomunicaciones y vendió la mayoría de UNE a Millicom en 2013.

 

2. Si no se vende la ETB pierde Bogotá

Los concejales del Partido Verde que apoyaron la venta dicen en su explicación del voto que hace 21 años la ETB valía 5,5 billones más que ahora. Si no se vende la ETB, en unos años Bogotá puede perder el patrimonio que tenía, pues la tendencia año tras año ha sido que la ETB pierda valor. Pierden los trabajadores porque la empresa puede terminar liquidándose mientras que si se asocia con un privado la empresa crece.

 

3. La empresa no está tan bien como la pintaban La ‘autopista’ del conocimiento de la que ha hablado Petro está vacía. La anterior administración se puso una meta de conectar 909.000 usuarios a 2015, para eso tendió cable de fibra óptica al frente de 1,2 millones de hogares en Bogotá, pero no pudo conectar ni el 10%. Los privados le ganaron en la comercialización. Cuando Petro recibió la ETB la mitad de los bogotanos tenían internet fija de ETB y cuando la entregó ya solo eran un tercio de ellos los conectados a internet de ETB. Entre 2013 y 2015, ETB invirtió $2,1 billones (equivalente a 92% de su patrimonio hoy) en tecnologías de punta. A pesar de esa inversión, ETB perdió usuarios en sus servicios tradicionales (telefonía fija e internet fijo). Y en general la empresa dio pérdidas en los dos últimos años (2014 y 2015). En Bogotá, su mercado natural por excelencia, en telefonía fija la ETB perdió casi 500.000 clientes de telefonía fija entre 2011 y 2015

 

. 4. Dejó de ser la gallina de los huevos de oro Contrario a lo que la gente piensa, Bogotá cada vez recibe menos dinero de la ETB. En años como 2015, 2011 y 2009 no ha dado dividendos a la ciudad. Ni un solo peso. Y en los años que ha dado dividendos, como 2013 y 2014, no ha sido fruto de su operación sino por la venta de sus acciones en Tigo.

 

5. ¿Qué va a pasar con la U. Distrital si se vende la ETB? A la Universidad Distrital no la afecta en lo absoluto la posible venta de la ETB. Por el contrario, si se llega a dar dicha venta, la Universidad podría ser la principal beneficiada. La razón es sencilla: la Universidad Distrital tiene el 1,78% de las acciones en la ETB. Y si quiere se puede quedar con ellas. La Universidad es autónoma para decidir que hacer con sus activos. Cabe recordar el caso de Ola, que cuando estaba en manos de dos telefónicas públicas, ETB y Une, era un fracaso. Buscaron un socio especializado. La cogió Milicom, la convirtió en Tigo y la empresa se disparó. La llevaron de 8% de participación en el mercado a 20%.

 

6. Para salvar la inversión que se hizo (mal) hay que meterle $2 billones Para que la inversión que se hizo en fibra óptica dé resultados hay que invertirle a la ETB otros 2 billones de pesos en los próximos tres años. ¿Tiene la ciudad esos recursos? Eso sin contar los que tendría que invertir después para estar al ritmo de los cambios tecnológicos de este sector tan volátil. De esa forma quedan dos opciones: 1) invertir al menos $2 billones adicionales para salvar la inversión que ya se hizo y hoy por hoy no funciona (atraer más usuarios) (y el Distrito no está en condiciones de hacerlo) o 2) se vende la ETB ahora que tiene más valor. O dicho de otra manera: Le metemos plata a una apuesta incierta en un mercado volátil o le sacamos jugo ahora a lo que ya tenemos. Es mejor negocio para Bogotá vender la ETB que quedarse con ella. La ETB tiene futuro pero bajo el paraguas de los privados. Por eso vender la ETB es crecer la ETB.