Por Alejandro Isaacs Giraldo
Periodista El Nuevo Siglo
Aunque en la puerta del horno se puede quemar el pan, si hoy el Concejo votara la ampliación del cupo de endeudamiento para obras de infraestructura, principalmente para mejorar la movilidad, la administración de Gustavo Petro podría mostrar acciones antes del 31 de diciembre de 2015 cuando termina el periodo.
La incertidumbre sobre la aprobación de los 3,8 billones de pesos de endeudamiento es porque hasta el jueves se inicia el debate de fondo en el Concejo y muchas cosas pueden pasar antes que se vote, pues hay intereses políticos en juego.
Hasta el momento la votación estaría 24 a favor frente a 20 en contra, sin contar la curul del Partido Verde que deberá ser reemplazada esta semana debido a que el concejal José Juan Rodríguez se encuentra privado de la libertad por su presunta participación en el carrusel de la contratación.
La administración Petro no tiene una mayoría absoluta en el Concejo por ahora. Son los ocho Progresistas, cuatro de La U, cuatro o cinco del Partido Verde, cuatro del Polo Democrático, dos del Partido Conservador y dos del MIRA. En la orilla de la oposición están las siete curules de Cambio Radical, seis del Partido Liberal, cuatro de La U, un Conservador, uno de la ASI y uno de Opción Ciudadana.
Los riesgos son muchos a pesar de tener mayoría en el Concejo. “Una cosa no tiene que ver con la otra, aunque sí tendrá mucha influencia”, le comentó a EL NUEVO SIGLO un integrante del Partido Verde que prefirió guardar su identidad frente a los acuerdos que se cocinan con el movimiento Progresistas y otras fuerzas políticas para lograr el umbral en las elecciones de marzo de 2014 donde se escogerá Congreso.
Mientras se acuerdan alianzas programáticas interpartidistas, la administración hace lobby con los jefes de los partidos, el alcalde le pide al presidente Juan Manuel Santos ayuda para que los concejales de la Unidad Nacional apoyen el cupo, la plenaria del Concejo inició el debate con la presentación de las ponencias: dos positivas de las concejalas Marta Ordóñez (La U) y Olga Victoria Rubio (MIRA); y otra negativa de Julio César Acosta (Cambio Radical).
Cuando un proyecto se aprueba en comisión, al pasar a la plenaria, donde no se puede cambiar ni una coma porque tendría que devolverse, históricamente se vota a pupitrazo, pero el cupo de endeudamiento está enredado desde el 9 de junio cuando ganó por mayoría en la Comisión de Hacienda. Estos dos meses largos se fueron en recusaciones e impedimentos para votar.
Los 3,8 billones de pesos se distribuirían en 800 millones de pesos para financiar la primera línea del Metro Pesado, 2,5 billones de pesos para la ejecución en obras de movilidad en toda la ciudad, 401.000 millones de pesos para el reforzamiento de 42 colegios y cerca de 100.000 millones de pesos para inversiones en el sector salud y parques.
Si la administración se mueve y no sale otro imprevisto de última hora, antes de la clausura de las sesiones ordinarias el 9 de septiembre se podrá establecer si en la puerta del horno se quemó el cupo de endeudamiento para obras y fue necesario el plan B de las Asociaciones Público-Privadas (APP) o por el contrario comienza los trámites para mover los 3,8 billones de pesos.
Obras |
Cables para Ciudad Bolívar y San Cristóbal; troncal de Transmilenio por la Boyacá y puentes peatonales; ampliación de estaciones de Transmilenio; obras de espacio público |
Avenidas Tintal, Rincón Tabor, Alsacia, Bosa, José Celestino Mutis |
Obras primera línea del metro de Bogotá |
Reforzamiento de 42 colegios en las localidades de Kennedy, San Cristóbal y Engativá |
Salud |
Parques Tabora, de Engativá; Las Margaritas, de Kennedy; La Esperanza, de Bosa; La Victoria, de San Cristóbal |
Optimismo
Es tan importante la aprobación del cupo de endeudamiento que los secretarios de Hacienda (Ricardo Bonilla), Educación (Óscar Sánchez), y el director encargado del IDU (Óscar Flórez) expresaron su optimismo frente al futuro del proyecto. Los tres están convencidos del compromiso que tiene el Concejo Distrital con el avance de Bogotá, toda vez que la mayoría de las inversiones que se financiarían con los recursos del cupo presentan atrasos, incluso, de más de una década.
Dentro del paquete, 401.000 millones de pesos la Secretaría de Educación priorizará en la intervención de 42 edificaciones escolares de 15 localidades de la ciudad cuya infraestructura debe ajustarse a la Norma Sismo Resistente y los estándares educativos vigentes. La ejecución de estas obras beneficiará a 65.000 estudiantes aproximadamente.
De acuerdo con el análisis de vulnerabilidad sísmica de las plantas físicas, presentado por la firma consultora P&D Ltda. estos 42 colegios tienen graves problemas en su infraestructura, lo que puede poner en riesgo la vida e integridad de los niños, niñas y jóvenes que estudian en estas instituciones educativas, en un eventual movimiento telúrico.