El Monterrey de México clasificó al Mundial de Clubes de la FIFA al consagrarse este miércoles campeón de la Liga de Campeones de la Concacaf 2012-13 con su triunfo 4-2 sobre el Santos, en la vuelta de la final disputada en el estadio Tecnológico de la ciudad de Monterrey (norte).
El colombiano Darwin Quintero, al minuto 38, y el panameño Felipe Baloy, al 50, pusieron en ventaja al Santos. Aldo de Nigris, al 60 y al 87, el argentino Neri Cardozo, al 83, y el chileno Humberto Suazo, al 90+1, hicieron los goles para la voltereta del Monterrey, que logró su tercera corona consecutiva de la Concacaf.
Intenso pero cerrado. Así resultó el primer tiempo, casi una copia fiel del partido de ida que se jugó la semana anterior en el estadio Corona de Torreón y que terminó empatado sin goles.
Ese 0-0 de la ida condicionó a los "Rayados" del Monterrey a cuidarse de no recibir gol de los "Guerreros" del Santos en la vuelta, situación que no pudo evitar en la primera mitad pues Quintero mandó el balón a la red en una jugada que debió haber sido anulada por fuera de juego.
Con ese tanto del "Científico del Gol" se esfumó la posibilidad de jugar prórroga o recurrir a tiempo extra y obligaba al Monterrey a marcar dos goles y no recibir más.
Sin embargo, Santos regresó del descanso determinado a asegurar el triunfo y logró su segundo gol en una jugada a pelota parada. Baloy lo anotó con un remate de cabeza en el cobro de un tiro de esquina. Todo parecía definido para que los "Guerreros" lograran el primer título internacional de su historia.
Con este escenario, Monterrey estaba obligado a marcar tres goles para remontar el marcador y lo consiguió luego de superar el desconcierto que le causó el gol de Baloy en el arranque del complemento.
Faltando media hora de juego se desató el vendaval regiomontano y los "Rayados" lograron el triunfo agónico que les valió su tercera corona de la región y el tercer pase consecutivo al Mundial de Clubes.