La pareja capturada tiene en su contra 15 denuncias por amenazas de muerte y chantajes. El auxiliador de la banda, era un taxista que por la facilidad de movilidad, visitaba a los comerciantes para intimidarlos y “cobrar” las exigencias.
Durante cuatro meses el grupo Gaula, recopiló testimonios, videos de cámaras de seguridad y realizó vigilancias avaladas judicialmente, con el fin de identificar, capturar y presentar a los tres integrantes de banda ante un juez de control de garantías, por los delitos de concierto para delinquir y extorsión agravada.
En la investigación se estableció que los esposos, impusieron una cínica modalidad para recibir los pagos. Como en los colegios, definieron algo que denominaron “matrícula”, pagos entre 2 y 5 millones de pesos a cambio de no presionar a los tenderos durante un mes. Quienes no accedían, podían cumplirla exigencia a través de cuotas mensuales entre 20º mil y 500 mil pesos que llamaban “pensión”.
Los 3 integrantes con talonario en mano, llevaban un registro de sus víctimas, y a cada una le entregaban un recibo entendido como una especie de paz y salvo, que las eximía de nuevas extorsiones cuando pagaban en los plazos que daban los delincuentes .
La pareja, alias Yovanis y Sujey, utilizaba el remoquete de la banda criminal Los Rastrojos para aumentar el nivel de presión a los comerciantes. El actuar delictivo se concentraba en sectores turísticos de Cartagena y otros municipios de Bolívar y Atlántico.
En los procedimientos de captura, los uniformados decomisaron una motocicleta y dos celulares, de los que salieron en el último mes más de 300 llamadas extorsionistas.
Los esposos y su cómplice, fueron cobijados con medida de aseguramiento en las cárceles de San Sebastián de Ternera y el centro penitenciario para mujeres San Diego, en la ciudad de Cartagena. El GAULA espera que, con la presentación de estos delincuentes, aumenten las denuncias y se fortalezca el proceso judicial para que reciban una pena ejemplar.