Confiados en que con la muerte de Muamar Gadafi , Libia tenga un “nuevo amanecer” y avance hacia la paz y la democracia se manifestaron los líderes occidentales tras el anuncio del Consejo Nacional de Transición de que el otro poderoso coronel fue abatido en su natal Sirte.
La noticia de la muerte de Gadafi y las imágenes que lo mostraron primero a manos de los rebeldes y luego muerto dieron la vuelta al mundo, en el capítulo final de ocho meses de sangrienta guerra interna.
"Le anunciamos al mundo que Gadafi murió a manos de los revolucionarios", dijo el portavoz del Consejo Nacional de Transición (CNT), Abdel Hafez Ghoga, en la ciudad que lideró la insurrección, Bengasi. "Es un momento histórico, es el fin de la tiranía y de la dictadura. Gadafi cumplió su destino", agregó.
Ghoga indicó que la muerte de Gadafi fue "confirmada por nuestros comandantes en el terreno, en Sirte, los que lo capturaron después de que resultara herido en la batalla".
El CNT "proclamará hoy la liberación del país y dará detalles sobre la muerte de Gadafi", dijo el jefe ejecutivo de ese organismo, Mahmud Jibril.
"Felicito al pueblo libio por esta jornada histórica y lo llamo en esta ocasión a dejar de lado los rencores y a proclamar con una sola voz 'Libia, Libia, Libia'", agregó.
Mientras miles de libios salieron a las calles de Bengasi, Misrata y Trípoli para festejar la muerte de Gadafi, con disparos al aire, bocinazos y bailando de alegría, líderes occidentales saludaron el fin de la guerra en Libia con la muerte del dictador.
La AFP obtuvo y difundió una foto de Muamar Gadafi, de 69 años, sacada por un combatiente, en la que se veía su rostro cubierto de sangre. La imagen fue captada con un teléfono celular.
"Gadafi fue arrestado. Está gravemente herido, pero todavía respira", había declarado Mohamed Leith, comandante de las fuerzas del nuevo régimen, a la AFP. Un video difundido por televisiones árabes posteriromente mostró a un Gadafi ensangrentado y todavía con vida caminando mientras era llevado a empujones por los combatientes del nuevo régimen tras su captura.
Los milicianos cercaban al líder derrocado, que sangraba por la cabeza, rostro y hombros. Un combatiente parecía apuntarle a la cabeza con una pistola, en el video difundido por Al Jazeera y Al Arabia.
Gadafi se había refugiado en Sirte tras ser derrocado al caer Trípoli el 23 de agosto, con sus últimas tropas leales, algunos de sus hijos y allegados.
En su ciudad, en la costa central, Gadafi, que gobernó Libia con mano de hierro durante 42 años, resistió durante más de un mes.
La guerra civil de 8 meses, que contó con la participación clave de la OTAN a favor de la insurrección, cobró más de 25.000 vidas.
Uno de los hijos de Gadafi, Muatasim, también fue hallado muerto en la ciudad informó Mohamed Leith, comandante de las fuerzas del nuevo régimen.
"Lo hemos encontrado muerto. Hemos colocado su cuerpo, así como el de (el ex ministro de Defensa) Abubakr Yunes Jaber en una ambulancia para llevarlos a Misrata", dijo el oficial.
El líder del CNT, Jibril, afirmó que otro hijo de Gadafi, Saif al Islam, estaba cercado en una aldea cercana a Sirte. "Se desarrollan combates en Wadi al-Ater", dijo. "Los revolucionarios atacaron un convoy armado. Sospechamos que Seif puede encontrarse en ese convoy", indicó refiriéndose a la última figura del régimen derrocado, considerado el heredero político de su padre.
Seif al Islam está acusado de crímenes contra la humanidad por la Corte Penal Internacional, que ayer le instó a entregarse y enfrentar a la justicia.
La noticia de la muerte de Gadafi se produjo en momentos en que las tropas del nuevo régimen vencían las últimas resistencias en Sirte.
Después de dos meses de asedio, los hombres fieles a Gadafi se vieron acorralados en un último barrio de Sirte, llamado Nº 2, de menos de 1 km2.
Las reacciones mundiales no se hicieron esperar y los líderes occidentales coincidieron en felicitar a las nuevas autoridades libias y expresas sus deseos que en esta era post Gadafi el país alcance la paz y la democracia.
La voz discordante y como era de esperarse fue la del presidente venezolano, Hugo Chávez, quien dijo que “asesinato de Gadafi es un atropello más a la vida”./AFP