Un espeso humo negro salió este martes de la chimenea de la Capilla Sixtina indicando que los cardenales reunidos para elegir nuevo Papa no llegaron todavía a un acuerdo para nombrar al sucesor de Benedicto XVI.
A las 18h40 GMT y durante varios minutos la fumata negra que salió de la pequeña chimenea de cobre fue recibida con gritos de decepción por las miles de personas reunidas en la plaza de San Pedro para la ocasión.
Comienzo de la ceremonia
Las puertas de la Capilla Sixtina fueron cerradas este martes con solemnidad para dar inicio al cónclave en el que 115 cardenales están llamados a elegir al próximo papa.
Los cardenales con derecho a voto (por tener menos de 80 años) juraron guardar silencio sobre las deliberaciones que mantienen hasta elegir al sucesor de Benedicto XVI, bajo los frescos de Miguel Ángel.
El ritual del cónclave se había iniciado por la mañana en la basílica de San Pedro con una misa en que se hizo un llamamiento a la "unidad " de los católicos en un momento crucial para la Iglesia.
Miles de fieles llegados de los cinco continentes asistieron a la solemne misa "Pro Eligendo Pontifice" en la basílica de San Pedro, presidida por el decano del colegio cardenalicio Angelo Sodano.
El próximo papa deberá hacer frente a importantes retos, empezando por la situación inédita de vivir a escasos metros del ahora papa emérito Benedicto XVI, que renunció por "falta de fuerzas" para seguir cumpliendo con su misión.