¿Cómo le irá a James con Zidane? | El Nuevo Siglo
Martes, 5 de Enero de 2016

El capítulo de Rafael Benítez al frente del Real Madrid no tuvo un final feliz, entre otras razones porque no tuvo una buena relación con los jugadores y, en especial con quien fuera la gran figura en la era de Carlo Ancelotti, James Rodríguez.

Atrás quedaron ya los siete meses en los que el volante colombiano, uno de los más queridos por la afición merengue tuvo que pasar de “consentido” a uno más, con pocas posibilidades de actuar, como quedó demostrado el domingo frente al Valencia, justamente porque, aunque Benítez lo desmentía y James no guardaba silencio, era un secreto a voces que su relación no marchaba por buen camino.

Ido Benítez, llegado Zinedine Zidane, surge la pregunta: ¿cómo le irá a James con el entrenador galo? La respuesta parece ser obvia: bien porque al galo le gusta el talento, el futbol bien jugado, ofensivo, siempre buscando el arco rival y nada amarrete-

Sin experiencia en el fútbol de alta competencia, Zidane tiene la misión de salvar al club de una segunda temporada sin títulos.

Pero para lograrlo este hombre que fue un jugador exquisito, amigo del buen trato del balón, talentoso, inteligente, seguramente recurrirá a lo mejor del plantel del elenco presidido por Florentino Pérez.

Se trata de un bautizo de fuego para el icono del fútbol francés, de 43 años, cuyos inicios como técnico en la élite habrían sido mucho más tranquilos al frente de cualquier otro club que el Real Madrid, un gigante planetario con diez Ligas de Campeones en su museo.

Pero Zidane, leyenda del club blanco, estaba destinado a entrenarlo como continuación lógica de su fichaje como técnico del filial en verano de 2014. Ahora tiene la oportunidad de mostrarse a la altura del jugador de excepción que fue.

“Zidane es, sin ninguna duda, una de las figuras más grandes de la historia del fútbol. Sabe lo que significa estar al frente de la primera plantilla del Real Madrid. Es consciente de lo duro y apasionante de este banquillo. Conoce además a muchos de estos jugadores porque como segundo entrenador lograron con él la décima Copa de Europa en Lisboa”, declaró el presidente Florentino Pérez al anunciar el relevo en conferencia de prensa.

“Zidane, durante toda su vida, ha sabido hacer frente a los desafíos y los ha afrontado con talento. Zidane: este es tu estadio y este es tu club. El madridismo va a estar a tu lado. Eres el entrenador del Real Madrid y para mí es un orgullo como presidente tenerte a mi lado”, añadió.

La designación supone una gran consagración para Zidane, aunque el calendario se haya precipitado por la marcha de Benítez, víctima de los malos resultados del equipo, goleado recientemente por el Barcelona (0-4) y tercero de la Liga a cuatro puntos del líder, el Atlético de Madrid.

“Es un día importante para mí. Estoy emocionado, más que cuando firmé como jugador. Voy a poner todo el corazón por este club para que salga todo bien”, declaró Zidane, acompañado en el acto por su esposa y sus cuatro hijos.

Al frente de un conglomerado de estrellas, empezando por el triple Balón de Oro Cristiano Ronaldo, Zidane no desentonará. Él mismo consiguió el Balón de Oro en 1998 y conoce las exigencias del estadio Santiago Bernabéu: ganar y generar un juego atractivo.

Su tarea consistirá en redirigir el rumbo de un equipo confundido por la gestión de Benítez y desmoralizado por un 2015 catastrófico: ningún gran trofeo mientras el eterno rival, el FC Barcelona, los ganó casi todos; una retahíla de lesiones y escándalos extradeportivos y la esperpéntica eliminación de la Copa del Rey por alinear un jugador sancionado.

Conocedor del vestuario

Su ventaja es que conoce bien a los jugadores y éstos le aprecian: fue el adjunto de Carlo Ancelotti en la temporada 2013-2014, cuando ganaron la Décima Liga de Campeones del club, y el francés Karim Benzema, por ejemplo, lo considera una especie de “hermano mayor”.

Resta saber si estará a la altura del desafío. En el banquillo del Real Madrid Castilla, el filial blanco, se forjó en las durezas de la tercera categoría española pero no consiguió subir el equipo a la segunda división la pasada temporada.

Ahora deberá adaptarse rápidamente al más alto nivel, con un primer partido el sábado contra el Deportivo de La Coruña en Liga.

Para ello deberá motivar de nuevo a sus estrellas y limar sus egos. “Lo importante es gestionar un grupo de 23 o 24 jugadores y el aspecto psicológica es lo que prima. Es el 80% del trabajo de un entrenador”, afirmó Zidane a principios de diciembre, resumiendo anticipadamente su principal tarea en el banquillo blanco.

¿Y con James? Es sencillo suponer que si una de las razones por las que Benítez se fue del club está relacionada con la actitud tomada por el estratega frente al colombiano, el nuevo estratega no va a cometer el mismo error y mucho menos va a desaprovechar su talento.

Entre talentos se entienden. De eso no hay duda y Zidane, es de suponer, llevará una relación cordial con el colombiano, como lo hizo Ancelotti, quien le exigió al máximo, lo convirtió en un jugador completo, pero a la vez lo valoró y siempre lo tuvo como titular.

No hay que olvidar que cuando James llego al Real era talentoso pero poco amigo de sacrificarse en marca y terminó siendo una especie de volante de contención desde donde el Real Madrid comenzaba a armar su ataque y que los grandes beneficiados fueron Cristiano Ronaldo, Benzema y Gareth Frank Bale, quienes tuvieron muchas opciones de gol fabricadas por el colombiano, quien además convirtió 14 tantos.

Un panorama mucho más prometedor le espera a James con Zidane en el banco. El francés de seguro sabrá explotar lo mejor del colombiano, opacado por cuenta de una lesión y de un técnico que no lo comprendió en su forma de jugar porque no hay que olvidar que hasta de extremo derecho lo puso.