A las dificultades que hasta el momento ha tenido la implementación del nuevo sistema de aseo en la ciudad se puede sumar que desde esta semana los operadores solo recogerán las bolsas de color negro, en las cuales se depositan los desechos orgánicos y otros materiales no reciclables; mientras que las bolsas blancas deben ser recogidas por los recuperadores ambientales.

Según los expertos la separación de basuras en la fuente es un proceso que se debió iniciar hace tres décadas, sin embargo hasta ahora es que la actual administración se dio la pela en arrancar este proceso, que puede ser traumático si la ciudadanía no pone de su parte.

En consecuencia desde esta semana, los operadores de aseo solo deben recoger las bolsas negras y dejar que los 14 mil recicladores que no están organizados trasladen las bolsas blancas para los centros de acopio. Puede que las empresas hagan caso pero ¿quién obliga a los recicladores? Hasta el momento su labor se limita a esculcar las bolsas para sacar los objetos que tienen precio en el mercado, el resto o queda esparcido en la vía pública o la bolsa es cerrada y dejada en el puesto.

Frente a la culturización para que los recicladores recojan las bolsas blancas el alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro anunció que la Empresa de Acueducto y Alcantarillado tiene una indicación específica para ayudar al pesaje para la remuneración respectiva de los recicladores que cumplen con este trabajo.

El mandatario explicó que con el nuevo esquema de aseo de la ciudad, las bolsas blancas serán recogidas exclusivamente por los recicladores y los operadores de aseo tienen la obligatoriedad de cumplir con esta orden.

"La Directora de la Unidad Administrativa Especial de Servicios Públicos (Uaesp) tiene instrucción directa para que se le notifique a todos los operadores del aseo la obligatoriedad de usar la bolsa negra y la prohibición taxativa de meter en sus camiones las bolsas blancas", aseguró Petro.

Así mismo, indicó que la directora de la Uaesp está encargada de establecer las horas específicas en las que sólo la población recicladora saldrá a recoger las bolsas blancas, sin la presencia de operadores que lleven los residuos no reciclables al relleno sanitario.

El burgomaestre aseguró que el único pecado que ha cometido la Administración Distrital en el tema de basuras es romper con el paradigma de que en los servicios públicos no podía caber la operación pública.

"Privatizaron el mercado del aseo y nos condujeron desde hace una década a un modelo de aseo improvisado y depredador. Un abuso con Bogotá, un abuso con la gente pobre que vive alrededor del relleno sanitario", dijo Petro.

El alcalde Petro manifestó que la Contralora General de la República ha entregado cuentas claras de cuánto ha pagado la ciudad de más con la operación de los privados. "Solo la Contralora haciendo las cuentas logró deducir que 500 mil millones de pesos pagaron los hogares bogotanos de más, casi como un regalo de su facturación de aseo, a los operadores privados", indicó.

También, sostuvo que el nuevo esquema de aseo no es un caos ya que se está demostrando la importancia de reciclar y separar en la fuente.

Por último hizo un llamado a todos los ciudadanos para que reciclen desde sus hogares y respeten los horarios de recolección, además que denuncien a los operadores de aseo que están recogiendo bolsas blancas.

Aunque es un hecho que el nuevo modelo de aseo en la capital del país sigue enredado, también es claro que este proceso que comenzó hace un mes y diez días promete un cambio en la cultura ambiental para los ocho millones de habitantes que nunca habían reciclado.