Combatientes de Hezbolá siguen llegando a conflicto sirio | El Nuevo Siglo
Martes, 21 de Mayo de 2013

El Hezbolá libanés envió nuevas tropas de élite para luchar junto al ejército sirio para hacerse con el control de la ciudad siria de Quseir (oeste), una intervención que Estados Unidos condenó y que llevó a la Unión Europea a prever la inclusión del brazo armado del movimiento chiita en la lista de organizaciones terroristas.

Estos acontecimientos se producen la víspera de una reunión en Ammán del grupo "Amigos de Siria", que incluye a países que apoyan a la oposición al régimen de Bashar al Asad, para preparar la conferencia de paz internacional "Ginebra II", impulsada por Rusia y Estados Unidos.

Según una fuente de los servicios de seguridad sirios, este martes se registraban violentos enfrentamientos en el norte de Quseir ,donde se reagrupó el contingente más importante de rebeldes presentes en esta estratégica ciudad.

"Al menos 31 combatientes de Hezbolá murieron desde el domingo así como 76 rebeldes", afirmó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

"En estos combates, nueve soldados murieron así como tres milicianos del régimen, lo que prueba claramente que el Hezbolá encabeza el ataque", afirmó el director del OSDH, Rami Abdel Rahman, quien también dio cuenta de la muerte de ocho civiles.

"Hezbolá envió nuevas tropas de élite. Hizo numerosos prisioneros entre los rebeldes", indicó a la AFP una fuente cercana al Hezbolá que pidió permanecer en el anonimato.

Presencia de iraníes en Quseir

Un alto responsable del departamento de Estado estadounidense declaró en Mascate que hay iraníes junto al Hezbolá en Quseir, pero no pudo proporcionar una estimación de su número ni precisar el papel que desempeñan.

Según el OSDH, los rebeldes ofrecen "una resistencia encarnizada para no abandonar a los 25.000 civiles bloqueados en la ciudad, pero el Hezbolá y el ejército continúan la importante ofensiva".

Por su parte, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) pidió la protección de los miles de civiles, muchos de ellos niños, atrapados en medio de los combates de Quseir.

Para Wadah Sharara, profesor de sociología en la Universidad libanesa, el Hezbolá chiita está implicado en "la batalla ya que esta ciudad es la puerta por la que pasan los hombres (los rebeldes en su mayoría sunitas, ndlr) y el armamento hacia el norte de Líbano y del norte de Líbano hacia Siria".

Dos sunitas que trataban de llegar a Quseir para participar en los combates fueron asesinados y enterrados el martes en la región libanesa de Wadi Khaled, donde la caída de obuses dejó nueve heridos, según un responsable local.

En Trípoli, la gran ciudad del norte de Líbano, al menos cuatro personas murieron y 35 resultaron heridas este martes en enfrentamientos entre partidarios y detractores de Bashar al Asad, indicó a la AFP una fuente de seguridad.

La Casa Blanca denunció "la intervención directa del Hezbolá" en Quseir y estimó que su presencia en Siria "incrementa las tensiones confesionales en la región".

En este contexto de creciente tensión, la Unión Europea estudia agregar a la lista de organizaciones terroristas al brazo armado del Hezbolá chiita libanés, a pedido de Gran Bretaña. Este tema se definirá "a principios de junio", según diplomáticos.

Analistas estiman que la ofensiva militar en Quseir se inscribe de cara a la conferencia internacional de junio en Ginebra.

Reunión el miércoles en Ammán

En las últimas semanas se está llevando a cabo una intensa actividad diplomática para organizar en junio una conferencia internacional sobre Siria que reúna en la misma mesa a representantes del régimen de Damasco y de la oposición siria, bajo los auspicios de las grandes potencias.

Ante la conferencia de Ginebra, los "Amigos de Siria" se reunirán el miércoles en Ammán, en presencia de 11 jefes de la diplomacia, entre ellos el secretario de Estado estadounidense, John Kerry.

Representantes de la oposición siria -- que el jueves decidirá en Estambul si participa o no en la conferencia de Ginebra -- exigieron garantías internacionales sobre la marcha del presidente Asad en el marco de cualquier posible acuerdo de paz, según uno de sus miembros.

Por otro lado, en el sur de Siria, el ejército israelí respondió después de los disparos sirios que durante la noche del lunes al martes alcanzaron un vehículo militar israelí en la parte de los Altos del Golán ocupada por Israel.

"No permitiremos que los Altos del Golán se conviertan en la zona de confort de Asad. Si causa disturbios en los Altos del Golán, deberá asumir las consecuencias", afirmó el jefe del Estado Mayor israelí, Benny Gantz.

AFP.