Semejanzas… | El Nuevo Siglo
Sábado, 30 de Marzo de 2024

El 11 de abril serán 22 años desde el golpe de Estado que derrocó a Chávez en Venezuela y que desgraciadamente fracasó. El casus belli no fue otro que una profunda crisis económica generada por 49 leyes que impuso Chávez por decreto y buscaban, como lo demostró con creces el tiempo, destruir la mayor potencia económica de la región.

Estos decretos generaron una amenaza contra la economía de Venezuela y llevó a numerosas marchas de los que sí producían en Venezuela. Como resultado se dio un golpe de Estado y se designó al presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela, Pedro Carmona, como presidente de Venezuela mientras se convocaban nuevas elecciones. La interinidad duró por desgracia solo 47 horas.

Las 49 leyes promulgadas -a la brava- por Chávez, incluían temas claves para instalar el socialismo del siglo XXI como la distribución de la tierra y el desarrollo agrícola, los hidrocarburos, controles bancarios a instituciones financieras, reforma a la justicia, sistema penal. También el detonante de este golpe de Estado fue el descabezamiento de toda la junta directiva de Pdvsa para imponer una junta directiva de su entera confianza y que le permitiera la destrucción total de la exitosísima compañía estatal petrolera venezolana y en fin… una revolución marxista completa.

Ante esto, Fedecámaras organizó multitudinarias marchas de oposición a dichas reformas pues era claro que el sector productivo de Venezuela no las quería por inconvenientes para la economía. Chávez solamente advirtió a quienes clamaban -por las buenas -que no aprobaran esas leyes que:Si aceptamos alguna modificación sería apretar más. Por ejemplo, a los banqueros podemos ponerles una ley más severa; igual a los terratenientes…” Chávez estaba listo para ser mandado al exilio a Cuba -donde por cierto deberían vivir todos los socialistas que no estén de acuerdo con el sistema económico y político del capitalismo-. Lastimosamente jamás se dio ese exilio, Chávez acudió al respaldo popular, la agitación de las masas y en muy pocas horas retornó al poder y ya el resto es historia pasado y presente…

De Venezuela se alejaron los tiempos del Boeing 777 de British Airways o del Concorde de Air France o la icónica planta de Volkswagen en Palma Sola la cual por cierto a partir del año 2001 empezó a ser invadida por gente que reclama como suyo lo que no ha trabajado.

De ahí en adelante inició un proceso de colectivización de todo lo que un humano pueda poseer, inclusive el futuro de los hijos de los venezolanos, totalmente alineado con un socialismo puro y duro. Y, como consecuencia muchas empresas fueron expropiadas y las que no alcanzaron a serlo se terminaron yendo como la Good Year, Bridgestone, Pirelli, Kellogg’s, Coca Cola, General Motors y muchas más alrededor de 500.000 empresas han cerrado operaciones en Venezuela.

Venezuela era una potencia que ni siquiera volteaba a mirar a Colombia, pues éramos nosotros una amenaza para ese ecosistema exitoso de productividad, progreso y capitalismo. ¡Cómo cambia la vida…!

juanfelipereyes@hotmail.com