RODRIGO POMBO | El Nuevo Siglo
Jueves, 29 de Noviembre de 2012

Comunismo de paquete

 

El exterrorista Petro (que así se les llamaba a quienes cometían actos de terrorismo), hoy Alcalde Mayor, tiene todo en su haber para ser un muy poderoso candidato presidencial en las próximas elecciones.

Su primera decisión fue abortar cualquier noble megaproyecto que, como la ALO, tenía  como objeto mejorar la calidad de vida de los habitantes capitalinos. Todo lo que huela al pasado, por loable que este sea, debe abolirse: su consigna comunista y revolucionaria así lo aconseja y su talante pendenciero así lo impone.

Construir sobre lo construido es una hermosa frase conservadora que, por lo mismo y por supuesto, debe ser extraditada del mapa político nacional y, a él que no le gustaban las extradiciones en el pasado, ha decidido ahora extraditar esta maravillosa sentencia política para evitar que sus antepasados ganen créditos frente  la opinión pública.

Una vez congeladas las decisiones y los proyectos anteriores, decidió crear un megabanco “popular” el que se le empieza a conocer como el “Banco Muisca”, no por su parecido físico con sus antepasados sino por las supuestas raíces aborígenes de sus administradores.

Con esa banca (recursos líquidos) le pondrá la competencia a Corabastos en vez de reformarlo y modernizarlo; monopolizará nuevamente la recolección de basuras, -no con la antigua EDIS sino con una filial de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá-; (¿está preparada y diseñada la EAAB para esas funciones?) y, emprenderá una cruzada de subsidios como la reducción de la tarifa de agua y el pasaje de transmilenio a costa de una muy incierta reforma tributaria para la ciudad.

A todo lo anterior se le suma una masiva y costosa campaña publicitaria en cabeza, entre otras, de la ETB para mostrar unos paupérrimos y populistas logros administrativos que no se compadecen con la parálisis del IDU, con la corrupción de la Secretaría de Educación Distrital (SED) y con la ineficiencia de los actores de la movilidad de la ciudad.

Ahí pues está el diagnóstico del primer año. Con el 33% de los votos, al igual que Hittler, se nos subirá a la Presidencia de la República una persona tan incompetente que ninguno de sus “amigos” lo terminaron acompañando siquiera el primer año de gestión.

*Presidente de la Corporación Pensamiento Siglo XXI