Rafael Gómez Martinez | El Nuevo Siglo
Jueves, 28 de Enero de 2016

ATALAYA

Estolidez Madura

“La de Maduro traspasó la dimensión lógica del razonamiento humano”.

 

Continuando con las perspectivas para el 2016 en un escenario local e internacional cargado de incertidumbre y temor es perentorio mirar con esperanza, y desesperanza a la vez, lo que sucede en nuestro hermano país venezolano, tan sufrido y humillado por el yugo del socialismo del siglo XXI.

 

Es práctica común de todos los gobiernos socialistas identificar a los enemigos internos y externos con el fin de fomentar su discurso, la confrontación y el linchamiento mediático. Dentro de este escenario, vi una película titulada Camino hacia la libertad con Ed Harris y Collin Farrel sobre la historia de un polaco quien es delatado por su esposa quien lo “acusa” de ser un agente que trabaja para potencias extranjeras enemigas. La escena es muy familiar a la Granja de George Orwell o al mismo 1984, su obra literaria cumbre.

 

El régimen de Maduro, a su vez, envía a la cárcel a todos sus enemigos internos y JMS Kerenski no se queda atrás con los enemigos de la paz. Y, si no  son los enemigos de la paz utiliza a terceros como las Farc para gobernar bajo el miedo o la expropiación como el caso de Friogan o las amenazas recibidas a José Felix Lafaurie o, también utiliza a los medios de comunicación afines al régimen de la paz para hacer linchamientos mediáticos. La combinación de las diferentes formas de lucha.

 

En Camino hacia la libertad queda más que demostrado que el poder de Dios es superior a cualquier ignominia que pueda padecer el ser humano.

 

Al igual que Lilian Tintori, quien con una valentía sobrehumana demuestra hasta la saciedad que el poder de Dios es superior a cualquier mal trato fuera del alcance de los derechos humanos padece Leopoldo López.

 

No deja de sorprender el silencio cómplice de la cancillera salomónica Holguín ante los atropellos a la dignidad humana que padece Lilian Tintori. Lo mínimo, señora canciller, en minúscula, Holguín, sería una solidaridad de género, pero  ni eso.

 

Garrido comentó: “Cuando comenzaba la época de la independencia venezolana frente a la corona española se pensó en el tránsito a la independencia, del despotismo a la libertad, del cambio de forma de gobierno, de la modificación del orden social y secular para pasar de una rancia aristocracia a un democracia al amparo de los nuevos imaginarios políticos que se vivían en la era de la post independencia”. Garrido Rovira Juan, De la Monarquía de España a la República de Venezuela, Univ. De Monteavila, 2008).

 

Doscientos años después de la independencia, los venezolanos tienen un largo y tortuoso camino hacia la libertad ante la estolidez de Maduro. La estolidez de Maduro y su régimen opresor traspasaron cualquier dimensión lógica del razonamiento humano. Tarde o temprano esa indolencia por la dignidad del ser humano tendrá su castigo.

 

Puntilla: Por lo pronto, a JMS Kerenski el pueblo colombiano le pasa su cuenta de cobro donde más le duele, en su imagen. 80% de desaprobación en la encuesta de Yanhaas. Peor que el elefante.