La Balanza de Pagos

Durante  el semestre académico busco fomentar la investigación. La investigación académica. La considero más beneficiosa para el aprendizaje que realizar quices, llamadas a lista y demás.

A mis estudiantes de Comunicación Social y de Finanzas les hago énfasis en el uso de las fuentes y en los temas que deben investigar. Uno de los temas más polémicos durante el semestre correspondió a la Balanza de Pagos.

Para lo cual se estableció un juego de roles. El trabajo de investigación consistió en realizar un Conpes. Con ministros a bordo, sindicatos y un presidente democráticamente elegido.

Dentro de mi rol de juegos me correspondió a Germán Vargas. En el escenario hipotético de que Germán fuera elegido para el período 2014-2018, lo primero que deberá hacer será revisar la situación fiscal del país durante el primer Conpes.

El día del examen final se presentaron unos sindicalistas encapuchados quienes se tomaron a pecho el ejercicio académico. Según el Banco de la República, “la evolución de la BP durante el 2012 registró un déficit en su cuenta corriente por US$ 11.415”. Entonces, uno de los sindicalistas comentó: pero no que veníamos divinamente, señor Presidente”.

La situación se puso tensa en el salón. Advertí que tradicionalmente nuestra cuenta corriente, según el profesor Gilberto Arango Londoño, ha sido deficitaria. La pregunta es: ¿usted puede vivir en déficit toda la vida?

Solamente, un alumno atinó a la respuesta. La respuesta es sí. Sí se puede vivir en déficit siempre y cuando usted tenga con qué solventarlo. Es lo que un ministro de Hacienda muy famoso llamó la prosperidad al debe.

¿Cuáles son los ingresos del Estado? ¿De dónde provienen? Básicamente, de tres fuentes: los recaudos por impuestos, las deudas adquiridas, las emisiones de bonos en el exterior. Además, de los ingresos de las empresas públicas mixtas.

El ejercicio académico continuó. Al final, Germán, el nuevo presidente, le reclamó, airadamente, al Consejo de Ministros: “¿cómo era posible que Juan Manuel le hubiera dejado el país en semejante situación fiscal tan comprometedora? Con los compromisos adquiridos en materia de subsidios, convenciones colectivas y demás”.

El nuevo Minhacienda para el futuro no la tendrá fácil. Porque deberá tomar una decisión drástica de recortes sobre el gasto central. Lo que algún ministro de Hacienda llamó: sangre, sudor y lágrimas. Es importante resaltar que el gasto central se encuentra en niveles cercanos al 5% del PIB.

“Dentro de esos gasticos se encuentra la cuenta de cobro del resort en La Habana, Cuba, profesor. ¿Por qué no recortamos ese gasto?”.

Y quién dijo miedo en el salón de clase. Se armó la gorda. Casi nos echan de la Universidad. Todos defendiendo sus intereses. Nadie quería ceder.

Puntilla. La pregunta que afloró fue: Profesor Gómez: ¿usted lo que nos quiere decir que Germán Vargas echará a la candela a Santos así como Santos echó a la candela a Uribe? Esta historia continuará…