Paralímpicos Colombia | El Nuevo Siglo
Lunes, 30 de Agosto de 2021

El evento de los Juegos Olímpicos Tokio 2020, en medio de la pandemia, deja varios aprendizajes que he recogido en tres de estos Atisbos: la primera columna de opinión se refirió a Los Valores Olímpicos Tokio 2020, como la disciplina, pulcritud de los protocolos, resiliencia y coherencia de la mística japonesa, con las miradas puestas en alto frente a su delicado manejo por la amenaza del covid.

En la segunda columna “Juegos olímpicos en prospectiva” se tocan los resultados de la delegación colombiana e invita al nuevo Ministerio del Deporte a fortalecer nuestra actuación a partir de una visión “en prospectiva” que reúna a todos los atletas colombianos participantes a lo largo de la historia, la cual se puede traducir en una encantadora lluvia de ideas, que impulse, sin miedo, a establecer ideales de futuro de la mano de sus actores principales. 

Y esta tercera columna, que no podría obviarse pues busca valorar la importancia de la participación de Colombia en los Juegos Paralímpicos y a su vez anima a imitar, en otras instancias de la política, el método y los retos que la han hecho posible.

El origen de los Juegos Paralímpicos data de 1948 cuando por inspiración del médico alemán Ludwing Guttmann se organiza la competencia deportiva entre veteranos con lesiones medulares de la Segunda Guerra Mundial. Doce años más tarde se oficializan los Juegos en Roma con cuatrocientos atletas en sillas de ruedas de 23 países, ya no solo asociados a actos de guerra, y en 1976 se abren los Juegos a personas con discapacidades de distinta naturaleza. Hoy, en Tokio 2020, compiten cerca de 4,400 atletas de 160 países en 23 disciplinas.

Hoy, con el hashtag #imPARAbles, el Comité Paralímpico Colombiano, invita a seguir los logros de la delegación de los 69 atletas colombianos a los Juegos siendo la delegación más grande en la historia, con una meta en grande de llegar a 28 medallas y 46 diplomas Paralímpicos.

El término de #imPARAbles es totalmente apropiado. A la fecha Colombia ocupa el puesto 25 con 2 medallas de oro, 4 de plata y 7 de bronce. Es de resaltar que la misión de dar estas oportunidades es palpable para todo ciudadano y creería que es este el mayor de los logros.

Cada historia, que entrega la página web del Comité, es apasionante y sobre todo ejemplarizante. Qué bueno sería conocer las 69 en los medios de comunicación masivos. Entre ellas, Moisés Fuentes, el rey de las piscinas, de profesión contador, quien desde el 2000 en Sidney no ha dejado de participar y completa, junto con la medalla de plata actual, cuatro preseas paralímpicas, luego de encaminarse en el deporte tras un disparo que lo deja parapléjico y Jean Carlo Minga, el llamado jaguar del Para atletismo colombiano, oriundo de Puerto Tejada, quien obtuvo medalla de bronce de los 100 metros planos, no obstante, su miopía degenerativa.

Enunciar estos nombres puede no ser leal a los méritos de cada uno, pero permite ver que crear caminos para el desarrollo de capacidades y el acceso a las oportunidades con enfoque continuo es la ruta. Enfocar, enfocar, enfocar es el medio y falta nos hace. Bien decía Sócrates: “el secreto para cambiar es enfocar toda tu energía no en luchar contra lo viejo sino en construir lo nuevo”.

*Presidente Corporación Pensamiento Siglo XXI

atisbosmariaelisa@gmail.com