MARTA LUCÍA RAMÍREZ | El Nuevo Siglo
Martes, 21 de Enero de 2014

La convención conservadora

 

Estamos a escasos ocho días de la Convención de nuestro partido,  el próximo 26. He venido dando la batalla porque se convoque a la Convención desde hace casi un año, e insistí en la reforma de estatutos, en que la verdadera democracia del partido son  sus bases.

Son nuestros directoristas municipales y departamentales, los concejales y diputados, las personas que en el pasado ocuparon esas y otras altas dignidades a nombre del conservatismo, nuestros exministros, expresidentes y las personas del común, quienes mejor representan los valores conservadores.

Son muchos los que han abrazado nuestras banderas e ideales por convicción y creen como yo que la vida digna y libre de los colombianos de hoy y de mañana es el verdadero objetivo de la acción política. Son muchos los que saben que el partido conservador, a partir del orden social y la institucionalidad, evoluciona constantemente con principios y valores que se adaptan a las exigencias contemporáneas, para lograr que la garantía de la vida y el respeto por la dignidad humana constituyan siempre fundamento esencial del Estado.

Nuestros convencionistas acuden a esta cita sabiendo que el partido Conservador colombiano tiene vocación de permanencia, puesto que ha sido pilar fundamental en la creación y vigencia del sistema republicano y democrático nacional y que seguirá siendo actor determinante en la consecución de una sociedad segura, justa, emprendedora, educada, incluyente  y en paz que potencie para todos las posibilidades que ofrecen la cultura y la civilización contemporáneas.

Ellos saben que la búsqueda de la paz y el bienestar de los colombianos, de hoy y del mañana, requiere de instituciones por encima de los individualismos. Que precisa de un Estado moderno y  eficaz que garantice a todos sus derechos y la mayor legitimidad institucional, mediante la garantía de una justicia pronta, cumplida y eficaz, el respeto a los derechos humanos, la lucha contra la corrupción y la pobreza, y la inclusión de todos los ciudadanos en las oportunidades.

 

Nuestra colectividad tiene el compromiso de alcanzar la seguridad humana integral del pueblo, entendida como seguridad física, seguridad económica, seguridad alimentaria, seguridad social, seguridad habitacional y seguridad jurídica dentro del Estado de Derecho. Además propende por la educación plena y de alta calidad, la generación de conocimiento, el desarrollo armónico de las regiones y la mayor productividad nacional.

Fieles a la razón de ser de un partido político y de acuerdo con lo que disponen nuestros estatutos, los conservadores de la base valoran la vocación de poder de la colectividad y saben que Colombia necesita del orden, del respeto a la ley, a la propiedad privada, del compromiso con la familia y de todos los valores e ideales del conservatismo.

Es el momento de discutir qué visión tenemos del futuro de la Nación y cuáles las políticas públicas necesarias para alcanzar ese objetivo de país. 

Nuestros convencionistas saben que más allá de cualquier presión, el futuro del partido conservador y de nuestra democracia está en sus manos y que por ello las decisiones que la Convención adopte deben guiarse por los más claros principios democráticos, por el sentido de responsabilidad con las generaciones futuras y no por el interés personal de unos pocos.