DEBATE Y ANÁLISIS
Repensemos la paz
Epígrafe
“La primera condición para la paz es la voluntad de lograrla”.
Juan Luis Vives
Los colombianos no podemos ser miopes, ni sordos, ni ignorar los pasos que se están dando para lograr la paz del país y poder dejar de estar manchando la tierra con la sangre de nuestros compatriotas. Es indudable que hay nuevos aires, nuevas posiciones y nuevas actitudes y eso es importante. Ahora tenemos que valorarlas, y verlas con una óptica de optimismo y grandeza, porque independientemente de quien la logre firmar está por encima el interés general y el de todo un país que quiere, por fin, vivir tranquilo.
Están sobre el tapete la propuesta de una Ley de punto final, o sea borrón y cuenta nueva, obviamente sin olvido y con reparación de las verdaderas víctimas de estos 60 años de guerra fratricida. Esta también la propuesta del excomisionado Luis Carlos Restrepo quien sugiere propiciar una discusión sobre Constituyente y le propone al Centro Democrático del expresidente Uribe cambiar su oposición al proceso de paz.
La senadora Paloma Valencia expresó que la posición de Restrepo es “valiosa al interior del Centro Democrático y dice que esta carta refleja la preocupación del excomisionado porque el Gobierno y las Farc avancen hacia un armisticio y una nueva Constituyente”.
A las Farc tenemos que creerles, hay tiempo para verificar sus buenas intenciones y sopesar sus propuestas políticas, que van desde el cese el fuego unilateral, pasan por el armisticio, para llegar a una Asamblea Nacional Constituyente. Esto obliga al Gobierno a seguir el debate de cara al país y a nosotros a entrar en el análisis como miembros de la sociedad civil.
Tenemos que reconocer que quien ha abierto las puertas a este cambio de actitud, al diálogo y al análisis de la paz y del posconflicto es el exministro Álvaro Leyva quien el pasado 9 de noviembre, le abrió canales de discusión del tema al expresidente Álvaro Uribe.
Tengamos paciencia, cordura en nuestras opiniones y sensatez para con el país, porque la sociedad no está del todo convencida de tanta bondad del grupo guerrillero y hay que dar pasos firmes, para que ojala se llegue a un acuerdo que todos podamos aceptar y que nos permita regresar al respeto absoluto por la vida y a la no violación de los derechos humanos de los colombianos.