Prudencia e imprudencias

Hay  que celebrar que se haya llegado a un acuerdo laboral con los principales sindicatos de Ecopetrol, lo que permitió evitar una huelga en la petrolera que habría resultado desastrosa en los actuales momentos.
Los  insensatos atentados contra la infraestructura petrolera que según se supo ascienden a más de un billón de pesos; el fracaso o en todo caso el limitadísimo suceso  que tuvo la ronda para adjudicar nuevas zonas de exploración; el desgano que han manifestado ya varias importantes petroleras para seguir trabajando en Colombia; la esquiva meta del millón de barriles que no hemos logrado alcanzar;  la caída del precio de su acción; la tardanza en lograr hallazgos nuevos de importancia y, en fin, la aguerrida competencia que recibirá Colombia de México para atraer inversión extranjera en hidrocarburos, ahora que en el país azteca han liberalizado las normas sobre inversión extranjera en este sector, son todos factores negativos.
Ecopetrol habría recibido una estocada mortal con una huelga en estos momentos.
Además de las partes negociadoras, a quienes hay que felicitar por supuesto, creo adivinar  en este arreglo la mano  hábil del nuevo ministro, Lucho Garzón, a quien le correspondió estrenarse como mediador en este conflicto entre Ecopetrol y sus sindicatos.
Afortunada resultó también su declaración de que la iniciativa de restablecer las horas extras debía concertarse con todos los sectores (habló de una “minga” concertadora); así esa oferta se hubiera lanzado al calor de la campaña política por la Presidencia.
Auguro éxitos a Lucho Garzón al frente de una cartera tan delicada y compleja como la del Trabajo. Su trayectoria y talante lo acreditan sobradamente para manejar con éxito este vidrioso frente de las relaciones laborales, que  él conoce tan bien como ninguno.
Estas afortunadas intervenciones de Lucho Garzón contrastan sin embargo con las  declaraciones apresuradas del Vicepresidente relacionadas con Ecopetrol.
Según el analista José Roberto Acosta (El Espectador.com, agosto 24), “los contradictorios pronunciamientos de funcionarios públicos también afectan el mercado, como, por ejemplo, cuando el Vicepresidente anunció en entrevista radial la venta en bolsa de otra porción de la Empresa (Ecopetrol), generando temores que terminaron haciendo caer el precio 4,3% en dos días, equivalente a una pérdida de capitalización bursátil superior a US$ 3000 millones".
Por mucho menos se le armó un escándalo mayúsculo a Petro cuando, recién posesionado, hizo declaraciones desacertadas sobre el precio de la Empresa de Energía de Bogotá que generaron bajas bruscas en el mercado bursátil de la acción.
Ojalá que en la medida en que el nuevo gobierno se vaya asentando se acentúe la discreción de los  altos funcionarios públicos. Para que la prudencia prevalezca sobre la imprudencia.
PD.¿Qué va a hacer la Fiscalía con las declaraciones del hacker Sepulveda? Les va a dar credibilidad? Si lo hace tendrá que formular muchas imputaciones penales pues lo que allí confiesa el hacker no es otra cosa que una gigantesca  y descarada  asociación delictiva en la que participó mucha gente.