Carta a negociadores de paz
Humberto De La Calle, Iván Márquez y demás integrantes de la Mesa de Conversaciones de Paz para Colombia en La Habana, Cuba:
Respetados Señores:
Es obvio que la sabiduría política es contraria a la estupidez, la mezquindad y la torpeza.
Por valerosa, sabía y autorizada decisión del presidente de la República, doctor Juan Manuel Santos Calderón, ratificada por el pueblo desde el momento de su elección como primer mandatario, luego en calles, plazas y encuestas políticas y seguramente en las próximas urnas electorales, ustedes tienen ahora la responsabilidad absolutamente histórica de devolverle a nuestro país el llamado bien supremo de la paz.
Para una mínima colaboración en el trascendental cometido de ustedes, me permito repetir en esta carta abierta un antiguo y conocido tema con el cual, desde hace más de veinte años, he venido fatigando a lectores amigos y enemigos. Se trata del establecimiento en Colombia de un Congreso Unicameral como el que fue discutido y aprobado en más de 120 naciones del mundo de hoy, encabezadas por países como Alemania, Corea del Sur, Suecia, Finlandia, Costa Rica, Ecuador, Perú, China y Panamá.
Hace más de 10 años, diferentes medios colombianos informaron que las Farc tenían entre sus puntos de negociación de paz, el establecimiento de un Congreso Unicameral. Seria increíble, para no decir absurdo, que dicho asunto no apareciera ahora en los trascendentales diálogos de ustedes.
Recordemos aquí que, entre otros muchos, los siguientes personajes nacionales expresaron en alguna forma su apoyo a la idea de que nuestra Patria tenga Congreso de una sola cámara: Los expresidentes Darío Echandía Olaya, Carlos Lleras Restrepo, Ernesto Samper Pizano, Andrés Pastrana Arango y Álvaro Uribe Vélez. Igualmente los constituyentes de 1991, Antonio Navarro Wolf, Alfredo Vázquez Carrizosa, Diego Uribe Vargas, Álvaro Echeverry Uruburu, Aída Abella, Jaime Fajardo, Darío Antonio Mejía, Arturo Mejía Borda y el destacado constitucionalista colombiano Carlos Restrepo Piedrahita, también le propusieron al país un Congreso Unicameral, porque entendieron que dicho Congreso representa lo moderno, lo funcional y sobre todo lo económico. Anotemos al respecto que Perú, desde finales del siglo pasado, tiene un Congreso Unicameral de apenas unos 130 legisladores. ¿Qué harán ustedes ahora, señores negociadores, por un cambio fundamental para Colombia que seguramente ayudará al desarrollo económico y social y a una paz política duradera?
Centenares de juristas y otros profesionales que he podido consultar sobre todo lo anterior, han estado de acuerdo en el hecho de que si el Presidente de nuestro país, en aplicación del artículo 104 de la Constitución Nacional consultara al pueblo colombiano sobre el establecimiento de un Congreso Unicameral y cualquier otro asunto en el que ustedes se pusieran de acuerdo, las mayorías nacionales desbordarían favorablemente las urnas electorales.
Servidor atento, José Luján Zapata