BIONAUTA
Crónica de un atropello
“La campaña para desprestigiar a Fedegán”
FRIOGÁN es una empresa dueña de cinco frigoríficos con participación del Fondo Nacional del Ganado (FNG) administrado por Fedegán hasta el 31 de diciembre de 2015, pero es también parte de una política pública que promovió el Ministerio de Agricultura en los años noventa para modernizar el sacrificio.
Con el compromiso de formalizar la cadena cárnica, un negocio de más de 14 billones, y cumplir con estándares internacionales derivados de los TLC, el Gobierno expidió el Decreto 1500 de 2007, con plazos iniciales hasta 2010, que no resistieron la presión de la informalidad -74%- y fueron prorrogados sucesivamente.
El ministro Restrepo, que autorizó la prórroga hasta 2016, afirmó que se trataba de un “plazo prudencial”, prudencia que ya completa una década y le permite a terceros, en muchos casos ilegales, lucrarse indebidamente con grave daño a los consumidores. Para cumplir el estándar del 1500, Friogán tuvo que endeudarse con el respaldo del FNG y orientó con éxito sus actividades al mercado venezolano, pero luego vendría la ruptura de relaciones en 2009, el aplazamiento del decreto y el inicio de las dificultades.
En este proceso, sin embargo, ninguna decisión de inversión o de aval a Friogán fue tomada por Fedegán, como se ha afirmado mentirosamente, sino por la Junta Directiva del FNG, creada por Ley con la presidencia exclusiva y capacidad de veto del Ministro de Agricultura.
Con el apoyo activo del ministro Iragorri, en 2015 se aprobó también la admisión de Friogán y del FNG al régimen de insolvencia -que no de quiebra- de la Ley 1116 de 2006. La inclusión del Fondo, sin embargo, no se dio por riesgo de quiebra -otra mentira-, sino para proteger los recursos parafiscales evitando la repetición de los acreedores contra el FNG.
Las mentiras hablan de malos manejos de Fedegán, desconociendo que la Federación es apenas administrador de las decisiones de la Junta presidida por el Ministro y que, además, tal gestión ha obtenido calificaciones de excelencia -entre 82,06 a 97,18- por parte de la Contraloría en sus auditorías de la última década. Sin indagar siquiera, el prestigioso “Julito” llegó a afirmar en su programa que Fedegán “hace lo que se le da la gana”.
22 de diciembre. El ministro afirma públicamente que Fedegán es el gremio más representativo de la ganadería, pero que el contrato no se renovará porque hay clausulas "inaceptables", sino que habrá uno nuevo. Días antes, en reunión formal de la que me pidió confidencialidad -compromiso que considero roto- me habló del sanduche en que se encontraba y, con sinceridad inusitada, de las presiones que recibía del Contralor y del propio Presidente para quitarle el contrato a Fedegán, a pesar de no encontrar argumento legal ni técnico para hacerlo, lo que también expresó a otro importante gremio del sector.
29 de diciembre, a dos días de la terminación del contrato, el Gobierno expide el Decreto 2537, a la medida contra Fedegán, pues incluye la admisión a la Ley 1116 como causal para que el ministerio asuma la administración de un Fondo Parafiscal. Resulta extraño que el ministro que decide proteger al FNG con la Ley 1116, y lo anuncia públicamente como opción salvadora, firme el decreto que incluye esa causal para quitarle el Fondo a Fedegán.
¿Qué hay detrás? Una campaña para desprestigiar a Fedegán y quitarle el contrato de administración del FNG después de 22 años de incuestionables resultados, emprendida por el exministro con la bendición escondida del Gobierno.
El ministro Iragorri tendrá que contarle al país algún día, cuál fue la "Razón de Estado" que lo hizo cambiar de opinión.
@jflafaurie