Amo con amor de ternura a la raza indígena, por lo mismo que he observado de cerca sus costumbres, encantadoras por su sencillez, y la abyección a que someten esa raza aquellos mandones de villorrio, que, si varían de nombre, no degeneran siquiera del epíteto de tiranos.
Clorinda Matto de Turner
En Colombia es histórico que tres indígenas hayan sido anunciados por el nuevo gobierno de Gustavo Petro en altos cargos del Estado, para desempeñar funciones claves e inherentes al restablecimiento de sus derechos.
Es necesario también que la oficina de asuntos indígenas del ministerio del interior, sea elevada a la categoría de viceministerio y sea ocupada por un indígena, ya que siempre han estado allí personas ajenas a nuestras comunidades ancestrales.
Dos mujeres y un hombre, profesionales ellos, con importante y experimentado recorrido en defensa de los derechos ancestrales de las comunidades indígenas, el liderazgo social y la defensa de los derechos humanos, ocuparán tres cargos claves en el Estado colombiano.
La lideresa Leonor Zalabata, oriunda del municipio de Ati Kwakumuke –Pueblo Bello y una de las lideresas sociales más importantes del pueblo arhuaco será la delegada de la Misión Permanente de Colombia ante la ONU en Nueva York. Se convierte en la primera indígena que tomará asiento en ese organismo internacional. Qué mejor vocera de nuestro país y de los miles de colombianos indígenas ante la Organización de Naciones Unidas, donde su voz será escuchada con respeto y atención. Muy seguramente allí hará pronunciamientos en favor de los derechos de los pueblos indígenas del mundo, del medio ambiente, del respeto por la madre tierra, del respeto de las máximas y únicas autoridades ancestrales de la Sierra Nevada de Santa Marta y los Mamos, que han querido ser suplantados por organizaciones espúreas.
Leonor Zalabata es la cuarta mujer y la primera indígena en representar a Colombia ante la ONU. Allí estuvieron sentados, personajes como Víctor Mosquera Chaux y los expresidentes Julio César Turbay y Alfonso López Pumarejo, entre otros.
En 2007 obtuvo el premio Chau Anna Lindh, que reconoce el compromiso de los líderes sociales con la defensa de los Derechos Humanos.
Su llegada a la ONU y de la mano del canciller Álvaro Leyva Durán, será clave para llevar adelante la línea medioambiental y en favor de la paz del actual Gobierno.
A la dirección de la Unidad de Víctimas llega la abogada emberá Patricia Tobón Yagarí, egresada de la Universidad de Antioquia, con una maestría en derecho internacional en la Universidad Externado. Ha acompañado el enfoque étnico de varios documentos oficiales por lo que se constituye en una garantía de que los derechos de las víctimas van a ser respetados en la medida de lo posible y dentro de las condiciones del Gobierno.
Giovanny Yule, indígena nasa y actual miembro del Consejo Regional Indígena del Cauca, llega a la dirección, de la Unidad de Restitución de Tierras, con la tarea de impulsar el Acuerdo de Paz y la reforma rural integral.
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