“Entregar el voto a quien crea lo merece”

ARRECIFES

El Alcalde que quiero

HAGO  parte de la mayoría de los bogotanos. Es decir de los que no hemos nacido en Bogotá, pero hemos tenido la suerte de ser alojados y acogidos para hacer nuestras vidas en este lugar de oportunidades.  “A veces madre, siempre madrastra”, como dice de España el poema atribuido a Blas de Otero, Bogotáes para muchos el sueño colombiano, que por cuenta de una sucesión de malas administraciones se ha convertido en la pesadilla de los millones que aquísobrevivimos.

Se acaba de cumplir el plazo máximo de inscripciones de candidaturas, asíes que ya sabemos quién quiere ser nuestro  gobernante por los próximos años. Carlos Vicente de Roux, Clara López, Rafael Pardo, Enrique Peñalosa, Francisco Santos y Alex Vernot se destacan en el partidor. Casi todos buenos candidatos.  Ninguno representa, a priori, un desastre para la ciudad.

Como simple ciudadano no tengo sino mi voto para aportar a la ciudad, pero estoy dispuesto a atesorarlo hasta el final, para entregárselo solo al que yo crea lo merece.

Mi primer requisito: quiero como alcalde de mi ciudad a uno que lo quiera ser. Parece una verdad de Perogrullo, pero no. Quiero votar por un candidato que solo quiera ser alcalde, nada más. Uno que no pretenda utilizar el cargo como trampolín para la Presidencia de la República. Que no venga a pelear con el Presidente, ni a ser su áulico. Ni a hacer oposición. Ni a montar un movimiento político nacional. Nada. Que solo venga a ser alcalde.

Segundo: necesito un candidato al que le duela la inhumanidad de Transmilenio a las 7 de la mañana en el Portal El Tunal o en el de Banderas. Uno que sepa lo que es andar en “transmi”. Pero que lo sepa por haberlo vivido y no por las proyecciones teóricas de cifras de sus asesores o por ocasionales viajes farsantes con cámaras de televisión. Alguien que haya sentido el terror de esperar el bus con la puerta abierta de la estación y una multitud atrás empujando hacia la vía. Y que haga algo para solucionarlo.

Tercero: uno que no use el cargo para dividir la ciudad entre los siempre buenos del sur y los siempre malos del norte. Alguien que no sea como alias “Romaña”y que por tanto no califique de rico extorsionable a todo el que tenga un carro, sin importar marca o modelo. Uno que entienda que los huecos de la malla vial no son un problema de los “ricos que andan en carro”sino un lastre vergonzoso en la competitividad de la ciudad.

Cuarto: uno que no tenga rabo de paja. Que no llegue al Palacio Liévano a defenderse de su pasado propio o ajeno. De sus malas amistades o de su lengua desenfrenada.

Busco un Alcalde que no tenga ataduras ideológicas que le impidan enfrentar la inseguridad que nos agobia. Uno que no saque excusas de “percepción”cada vez que hay un atraco masivo. Y, sobre todo que entienda que la calle es de todos, no solo de los vendedores ambulantes, de los malandrines o de los malpar…queados.

@Quinternatte