Responsabilidad de los empresarios
Desde hace varias décadas, se viene hablando en todo el mundo de la Responsabilidad Social Empresarial(RSE), también denominada Responsabilidad Social Corporativa (RSC), términos que hacen referencia al conjunto de obligaciones y compromisos, legales y éticos, tanto nacionales como internacionales, que se derivan de los impactos que la actividad de las organizaciones produce en el ámbito social, laboral, medioambiental y de los derechos humanos. La RSE que manejan las empresas despierta el interés en los ciudadanos que comienzan a creer que a través de su trabajo en determinadas empresas o comprando algunos productos de una compañía en particular, están colaborando de forma directa a solucionar problemas sociales o ambientales del entorno.
Puntualmente en Colombia, un gran número de empresas viene buscando estrechar los vínculos con la sociedad y el medio donde operan, no sólo con la simple generación de empleos o con el pago de impuestos, sino que han trabajado en programas específicos buscando incrementar activamente el bienestar de las comunidades que son cercanas a su operación, invirtiendo en progreso social y económico, así como en la conservación del medio ambiente.
Las empresas que están trabajando este concepto tienen en cuenta las relaciones con sus empleados, clientes, proveedores, accionistas, comunidades locales y la sociedad en general y la forma como enfrentan el impacto que generan. Estas compañías, en sus informes anuales de desempeño, además de reportar los resultados financieros o la situación económica y de inversión, vienen incluyendo desde hace varios años, un apartado dedicado a mostrar indicadores de gestión sobre responsabilidad social y sostenibilidad.
La semana pasada se publicó un estudio sobre responsabilidad social corporativa, desarrollado por la firma consultora internacional KPMG, donde destaca a las empresas colombianas que, por encima de muchas otras de países latinoamericanos, en términos de presentación de reportes y resultados del impacto que tienen con la sociedad, ubica a nuestros empresarios en un nivel alto, cercano a compañías de países desarrollados. Pero lo importante, más allá de lo que tiene que ver con la publicación o socialización de los reportes, son las acciones o gestiones activas que puedan desarrollar nuestros empresarios para elevar la calidad de vida de la sociedad y la conservación del medio ambiente.
Creo que se viene haciendo un gran esfuerzo, por parte de los empresarios, socializando con las comunidades y los grupos vulnerables para mitigar los impactos negativos que pueda ocasionar la apertura de una nueva planta, la explotación de ciertos recursos o la puesta en marcha de algún plan de inversión. En la medida en que las empresas se comporten de forma responsable y transparente respecto al compromiso que tienen con su entorno, trabajando activamente por el progreso social, no solo serán más competitivas y sostenibles a largo plazo, sino que tendrán el reconocimiento de la sociedad y así también harán un gran aporte para mejorar la calidad de vida de nuestros ciudadanos y defender nuestros recursos naturales frente al ataque medioambiental al que se ven expuestos en muchas ocasiones.