Los acontecimientos que se han sucedido bien valen la pena para reflexionar sobre ellos: porqué ocurrieron, sus orígenes así como su gravitación sobre la vida del país. Sea lo primero reflexionar y si es que los partidos políticos que tanto han gravitado sobre la vida nacional, deben pensar con respecto a todo el entorno de que está aún sucediendo.
Los partidos políticos colombianos que han estado presentes en la vida nacional en más de cien años de existencia, que en cierta forma formaron parte de los movimientos libertarios lo que es más importante, en la formación de la identidad nacional desde cuando nos liberamos del yugo español. A partir de 1886, cuando se le dio al país una estructura de sociedad fijando las normas bajo las cuales deberíamos existir, su contribución ha sido notable, pues le han dado a la nación el perfil que continúa vigente, salvo que modifiquemos nuestra manera de conformarnos como lo hemos hecho hasta ahora.
No añoramos a los partidos políticos: el liberal y el conservador, sino que es necesario reconocer que los dos han participado en la creación de este país hasta lo que tenemos hoy; han participado como lo ha definido la historia en la confección de lo que hoy tenemos. Durante muchos años nos hemos disgustado unos con otros, pero hoy por hoy, aunque persistan nuestras diferencias debemos reconocer que su presencia en la vida nacional ha sido alta útil y creativa. Filosóficamente estamos distanciados, aunque las discrepancias han sido creadoras. La vigencia de pensamientos de cómo se debe dirigir un país como éste siguen vigentes. Unos y otros creen añoran y desean su vigencia.
La presencia de buena parte de los ciudadanos colombianos en paros que pueden ser creativos, que no los desórdenes que han suscitado. Buena parte de los colombianos y observadores de la vida nacional, aseguran que los partidos políticos han desaparecido y que su falta nos tiene bastante tristes y afligidos por lo que hemos tenido necesidad de padecer, los partidos políticos son sin lugar a dudas, un valioso activo de la vida colombiana, por lo cual es poco congruente pensar que han desparecido cuando lo que ha desaparecido es la dirigencia de ellos.
Mal se puede decir que nuestros partidos políticos han desaparecido. ¿Será que Colombia sufre de la falta de dirigentes que azota al mundo entero? Estamos por concluir que la manera de pensar de los partidos, cuya ignorancia conllevaría a su desaparición; en los nuestros el modo de pensar no ha desaparecido; las diferencias existen, por lo cual el gran problema es la falta de dirigentes.
Nuestros partidos políticos no han desaparecido, lo que muestran es una falta de dirigentes y directores que los pongan en vigencia creativa, como ha sido por lo menos desde 1886 cuando resolvimos darnos una norma de acción que sin olvidar el proceso de independencia y respetando la variedad de nuestra país, creamos una Colombia que difiere a la que hoy tenemos.