Restrepo
La campaña presidencial adquiere fervor con el paro agrario anunciado, el miércoles 16, por el líder de la “dignidad cafetera” a través del programa televisivo 360º; hubo consenso, en tal sentido, entre los participantes quienes no dejaron duda de su apoyo al evento y de la inclinación antisantista del movimiento. Se quiere aparentemente influir en el resultado de las elecciones presidenciales y algunos consideran que tal finalidad viene de tiempo atrás.
Se incorporó al debate Juan Camilo Restrepo, exministro de Agricultura y Desarrollo Rural, quien forjó la política gubernamental en formalización de la propiedad agraria, el debido trato a las víctimas y expuso los alcances pertinentes en Política Integral de Tierras (Villegas Editores, Bogotá, 2011); esta obra fue objeto de varios artículos en esta columna. Restrepo señaló que divulgará pronto un nuevo libro, Paz y Tierra, bases del postconflicto rural en Colombia (Editorial Random Mondadori), con Andrés Bernal que arrojará luces sobre el debate; excuse el lector, a esta altura, expresar que se tiene pendiente el análisis del texto del exministro denominado Hacienda Pública (Universidad Externado de Colombia, Bogotá, 2000) donde se observa la mención, como fuente, de un pariente cercano: Aurelio Camacho.
Trascendió que la desvinculación de Restrepo del Ministerio se caracterizó por el desacuerdo con sus copartidarios; el exfuncionario sostiene que la causa fue negarse a repartir puestos y mermelada y Efraín Cepeda, antiguo presidente del Directorio Nacional Conservador, habla de posición izquierdista de Restrepo incompatible con la ideología conservadora. Otro roce se prevé con José Félix Lafaurie, presidente de Fedegan, quien critica lentitud en programas del Ministerio, lo cual era previsible por los obstáculos legales e ilegales de quienes usufructúan tierras indebidamente; esta demora puede corregirse al adquirirse la correspondiente experiencia. Sería interesante, en términos de política pública, precisar en qué consisten las divergencias porque podría afectarse el accionar del Gobierno Nacional y la armonía en la coalición gubernamental; es una tesis, tal vez grave, al existir acuerdos políticos previos.
La participación del exministro le dará solidez, veracidad y rigor a los debates y fortalecerá la posición del Gobierno Nacional: no solo entiende de los compromisos adquiridos, sino de su cumplimiento razonable. En todo caso, se espera, en el debate agrario, un entendimiento perenne, positivo y se descarten vías de hecho como los cercos a las ciudades.