Reconciliación
Felizmente terminaron las elecciones que eligieron Presidente a Juan Manuel Santos, o JuanPa, para Ana Mercedes. Fue un certamen civilizado y democrático. Zuluaga, como buen hijo de Pensilvania, estuvo a la altura y gallardamente reconoció su derrota.
Cancelamos las reservaciones quienes teníamos que salir antes del 7 de agosto, ante lo que se nos venía con Uribe. Podemos respirar y fijarnos un futuro en paz y optimista. Ganó Colombia. Con Uribe, que lo que toca lo corrompe, la cosa habría sido funesta, a juzgar por sus interminables acusaciones -sin pruebas-, llenas de odio y resentimiento.
Muchas son las cosas que se deben atender y muchos los pasos que se deben hay dar para aprovechar este ambiente de reconciliación en que nos encontramos. Santos, podrá gobernar otros 4 años, que fueron los que nos quedó debiendo Uribe, cuando se dedicó a “montar” un nuevo mandato. Olvidó sus deberes y se dedicó a violar las normas para perpetuarse en el poder.
Hay que desmontar la reelección, ha sido nefasta; derogar el decreto que admite como huéspedes permanentes a los expresidentes en las instalaciones militares -que viven allí de “gorra”-. Esa convivencia se dedica a polarizar las fuerzas y estimular golpes indeseables.
Se deben establecer sanciones ejemplares para quienes traten de arrebatar, con calumnias, el voto de los ciudadanos, como ocurrió con el supuesto ingreso de dos millones de dólares a la campaña de Santos… y para los que acudan a espionajes y prácticas dolosas a través de hackers y demás artimañas. Inventar especies es más grave que comprar votos.
Muchas son las cosas por remediar, para eliminar campañas tan implacables, injuriosas y faltas de caballerosidad, que solo conducen a la polarización y la violencia. Por fortuna, Zuluaga, no le “caminó” a Uribe en los últimos días y prefirió una gripa diplomática, a seguir los consejos del espadachín.
Se requieren reformas políticas, que limiten los períodos de los parlamentarios y los unifiquen con los de Presidente, alcaldes y gobernadores; que con firmeza ponga límites e independencia a los tres poderes; que ponga en cintura a los entes de control, especialmente a la Procuraduría; que establezca las reglas claras para afianzar la paz, una vez se firmen los acuerdos. Santos y Vargas Lleras, demócratas integrales, han hecho un llamado a la unidad nacional y a la reconciliación para enderezar las cosas.
Negro. El ultraje de la holandesa a Falcao y James.