GABRIEL ORTIZ | El Nuevo Siglo
Viernes, 11 de Octubre de 2013

Los impedidos

 

Cada día toma más fuerza la costumbre de los impedimentos en el Congreso, que deja fuera del ring a un importante número de senadores o representantes que participan en la discusión de importantes proyectos de Ley que pueden beneficiar, o por lo menos aliviar la situación de nuestros compatriotas.

Centrémonos en el caso de la Reforma a la Salud. Se ha acusado a muchos congresistas de tener nexos con las entidades encargadas de prestar esos servicios. 42 se declararon impedidos para votar el proyecto, porque recibieron dineros para adelantar sus campañas, por tener negocios con el sector, por tener parientes vinculados con el negocio, o por cien razones más. A 14 de ellos les aceptaron los impedimentos y no votarán pero… ¿intervendrán en los debates?

Es inaudito que entre un centenar de personas, 42, es decir, más del 40% se declaren impedidos. Desconozco la forma como actúan en estas materias los “padres de la patria”  en otras naciones, pero considero que para salir elegidos, deben demostrar que son acreedores de la confianza pública y no tener intereses que en algún momento les impidan cumplir con su deber… y que tampoco puedan amenazar con “paro legislativo” para pasar de “agache” en las plenarias en las que se legisle sobre sus intereses.

Por ello, ahora que se avecinan las elecciones de cuerpos colegiados, la ciudadanía debe abrir los ojos y analizar muy bien, a quienes escoger. Las listas que se conocen están llenas de “gente impedida”. En todas existen parientes que van, unos para Senado y otros para la Cámara, contribuyendo al nepotismo que tantos vicios y corruptelas conlleva. Porque son los mismos con las mismas.

Difícil encontrar gente sin impedimentos en nuestro medio, pero vale la pena hacer el ejercicio, antes de depositar el voto.

Por lo pronto y frente a la Reforma a la Salud es urgente que los senadores, no impedidos, le apliquen lupa a lo aprobado en las Comisiones, para alejar los “micos”, que los financiados por el sector salud, puedan haber introducido, porque los colombianos rasos, no tenemos quien nos defienda. No hacemos “lobby”.

Blanco. Las declaraciones de Ingrid Betancourt a Caracol, llamando a la cordura a los enemigos de la paz. “Necesitamos un país en donde quepamos todos, así haya impunidad” precisó.

Negro. El rifirrafe entre Contraloría y Fiscalía. Desorienta y atemoriza.

gabrielortiz10@hotmail.com