Fernando Navas Talero | El Nuevo Siglo
Miércoles, 24 de Febrero de 2016

BITÁCORA DELA COTIDIANIDAD

Derrumbe en la 3ª vía

 

 “ENTONCES, la “Tercera Vía”,   o mejor: el “camino del medio” que debe abrir para “Cerrar la Brecha”  (López Michelsen) o practicar la “Democracia Económica”  (Lleras Restrepo) , a Juan Manuel no le queda otro remedio que inventárselo, valerse de su propia imaginación y con cuidado, pues los factores de poder que lo rodean no son Ángeles del Cielo y tal vez si Pedros Boteros, demonios que lo ensalzan y rodean con la hipocresía propia de la política”.  (El Nuevo Siglo, Bitácora,  09-07-2014)

 

La advertencia con  respecto a la promesa del Presidente de acudir a una 3a  vía para resolver el problema colombiano se derrumbó o, mejor, solo fue retórica. Lo que sucede ahora  confirma que el Estado Social de Derecho es un cuento chino y que el proyecto neo-liberal consagrado en la Carta  se impone sin tropiezos.

 

Los activos del Estado, necesarios para buscar recursos distintos del impuesto,  se dilapidan en subastas acomodadas y opuestas al querer de la comunidad nacional. El señor Cárdenas lo hace  sin recato. Isagen la vendió al único postor siguiendo la pauta del sistema privatizador impuesto por  Gaviria, “el revolcador”: El Estado no debe competir con el sector privado, se predicó en esos años. En la lista de propiedades públicas próximas a “subastarse” por el administrador de la Hacienda y despilfarrar están: El Banco Agrario, ISA, La Fiduprevisora, y otras 12 hidroeléctricas, amén de Ecopetrol.

 

Insólito  que se viole la Constitución y todo siga igual. La Carta ordena que cuando el Estado disponga de los bienes públicos debe promover la democratización de la propiedad y ofrecerá oportunidades a los trabajadores y a las organizaciones solidarias para acceder a ella. (Artículo 60).

 

Aparte de este arbitrario panorama, el Sr. Cárdenas patrocinó el desequilibrio económico generado por el alza en la divisa americana,  pues habiendo podido intervenir el mercado se hizo el de la vista gorda dizque para dejar que el fenómeno siguiera su rumbo normal y mirando el acontecimiento como benéfico para sus amigos exportadores y la industria nacional.

 

A tal punto llegó el desmadre que el Banco de la Republica optó, apresuradamente,  intervenir el mercado, el viernes 19 pasado, para contener el descalabro social y la crisis de la devaluación.

 

Por último,  en este panorama, para rematar, el Fiscal General no encuentra conducta punible que achacarle al señor Cárdenas con motivo del desfalco de Reficar, pero su responsabilidad política queda impune porque el Congreso no conoce la Moción de Censura, prevista en el artículo 135-9 de la Constitución, pero si las mociones de aplauso que repetidamente aprueba.

 

El país,  a la velocidad de Nairo, se aproxima a la bancarrota, la 3ª vía que ofreció Juan Manuel se derrumba,  las calificadoras de riesgo lo denuncian, los capitales extranjeros se van como golondrinas y  el señor Cárdenas sigue  tranquilo y soberbio como siempre. La “ciencia” económica es una alienación mental de los narcisos.