Un liderazgo por las TIC
Se realizó esta semana en Cartagena la vigésima novena edición de Andicom, el gran evento de las telecomunicaciones y sitio privilegiado para el más trascendental y eficaz encuentro entre dirigentes oficiales, empresariales, académicos y expertos del tema. Un escenario sin parangón en la búsqueda de la innovación y la creatividad, tan urgentes y necesarias para nuestro desarrollo y modernización.
Durante tres días, dos mil asistentes tuvieron la oportunidad de escuchar a conferencistas de talla mundial y cambiar ideas y experiencias sobre los últimos adelantos como, por ejemplo, la virtualización monetaria, cuyo creador es el banquero Matoni, quien se hizo presente y dialogó con los asistentes en búsqueda de desarrollar sus aplicaciones en nuestro país.
Manuel Martínez Niño, el místico y visionario director de Cintel, ha sido el líder indiscutible de esta cruzada vital para plasmar en Colombia el llamado “cambio tecnológico”, instrumentado por las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones -TIC-. Concepto revolucionario que él ayudó a plasmar en la ley colombiana que lo normatizó en nuestro medio. En su discurso de bienvenida manifestó que en todo este proceso se han logrado determinantes contribuciones de la ONU, el Banco Mundial, el BID, la Uncla y otras grandes universidades internacionales.
En el acto de clausura, el presidente Juan Manuel Santos y el Mintic, Diego Molano, presentaron el programa Vive Digital II, continuación del que le ha permitido a Colombia encabezar la lista latinoamericana de países en vía de digitalización. Martínez Niño aprovechó la oportunidad para solicitarles que proyecten este impulso al Plan Nacional de Desarrollo, digitalizando sus objetivos y procesos y garantizando el acceso a la Sociedad del Conocimiento a cuarenta y seis millones de colombianos y convirtiendo a las TIC en el eje transversal del desarrollo nacional.
Pero el mayor logro de Cintel lo acredita el haber llevado a la práctica grandes proyectos en muchas partes del país, como el realizado en la misma Cartagena. En las zonas deprimidas ha logrado, gracias a “las tabletas de Dios”, mejorar el nivel de vida y competitividad a las comunidades pesqueras, organizándolas y comercializando el producido de su tarea.
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Adenda
Nosotros desde esta columna y desde Asucom, la asociación de usuarios de las comunicaciones, también hemos luchado por el diseño de un plan nacional de desarrollo, integrado, en todos sus niveles y sectores, y actividades socioeconómicas que declare “bien público” a las TIC y acabe con las arbitrariedades permanentes de autoridades regionales y municipales, que impiden el normal progreso de esas nuevas tecnologías.