Según Garay: El sindicalismo es producto de la Revolución industrial. Puede ser definido como una asociación o agrupación formada para la defensa de los intereses económicos y laborales de un grupo de trabajadores asalariados (Garay, Luis Jorge. "Debilidad de movimiento sindical" en Colombia: Estructura industrial e internacionalización. 1967-1996)
Fue en Inglaterra donde aparecieron asociaciones de este tipo, las cuales reunían a sastres y tejedores que tenían como propósito fortalecer su posición frente a las grandes industrias.
El primer sindicato en Colombia data de 1847, cuando el sector de los artesanos se unió para exigirle al gobierno de ese entonces que incrementara los aranceles de los productos importados.
En el año 1928 se produjo el primer gran paro de trabajadores de la United Fruit Company convulsionando la pacífica región del Magdalena.
Debemos remontarnos a 1935 cuando nació la CTC, de origen liberal y comunista, Confederación De Trabajadores de Colombia.
En 1946 apareció la UTC, Unión de Trabajadores Colombianos, en un principio de origen conservador y jesuita para hacer contraprestación al movimiento comunista de CTC. De la U.T.C surge el líder conservador Tulio Cuevas, por ejemplo.
En 1964, salió a la palestra la CSTC, Confederación Social de Trabajadores de Colombia, de origen comunista, organización sindical que tuvo una gran relevancia hacia 1977, el 4 de septiembre, cuando bajo el gobierno de Alfonso López convocó a un paro nacional que por poco lo tumba. Ese paro fue violento dejando tan solo Bogotá más de 40 muertos.
Hacia 1971 surgió la CGT, Confederación General de Trabajadores, de tendencia social democracia teniendo en cuenta que en la década de los setenta del siglo pasado se creó un movimiento a nivel regional conocido como la democracia cristiana, sobre todo en Chile, cuyo representante más relevante fue Eduardo Frei, quién apoyó a Salvador Allende.
De paso, resulta curioso que lo que hoy llaman cacerolazo contra el gobierno de Iván Duque Márquez, promovido por los dirigentes de la izquierda carnívora colombiana, haya surgido del descontento del pueblo chileno en contra del mismo Allende cuando la situación económica del país austral se convirtió en una olla a presión, el cual reventaría posteriormente con la toma del poder del General Augusto Pinochet.
Es importante recordar que los sindicatos tan solo representan a menos del 8% de la población económicamente activa, 1.700.000 empleados, aproximadamente, cifra de afiliados que viene en descenso.
Al parecer, sus mismos afiliados no se están sintiendo representados por sus agremiaciones, como lo es el caso de Fecode, organización sindical que se ha convertido en un partido político de izquierda carnívora la cual presiona a diferentes gobiernos, adoctrinando a sus afiliados de acuerdo con sus sesgos ideológicos.
De las reivindicaciones sociales y económicas se está pasando a las políticas, como lo vemos en el paro del 21N.
Sin contar, con los más de 300 policías heridos, tres muertos, uno que perdió un ojo, mujeres policías heridas y golpeadas, pérdidas de Transmilenio superiores a los $5.000 millones. Se calcula que en tan solo Bogotá generó pérdidas superiores a los $50.000 millones.
¿El tal paro no existe? O, ¿Las organizaciones sindicales por su miopía política y de mercado se están extinguiendo?
Puntilla: Curioso, que el entonces procurador Ordoñez sancionara de por vida a Andrés Felipe Arias, vs el actual procurador de pasarela Carrillo.