Hay una polemica por las restricciones a personas mayores de 70 años a causa del coronavirus. El Presidente Duque ha tomado medidas drásticas para proteger esta población. Lo hace con responsabilidad y no por el hecho de ser joven. No debemos equivocarnos, porque esta restricción no obedece a una competencia generacional, es simplemente basada en el sentido común y obligación del mandatario de cuidar y preservar la salud del colombiano.
Por supuesto que quienes pasan de los 60 y 70 años, por lo general son abuelos, entonces no entiendo porque algunos se ofenden al ser calificados afectivamente como “abuelitos”. Personalmente me encanta que mis nietos me llamen así, aquello no es indicador de vejez, es una condición afectiva de vida.
Ahora bien, las personas mayores son aptas siempre y cuando su estado de salud se encuentre bien. Hoy la esperanza de vida en Colombia para mujeres está en 79 años y hombres 74, sin embargo hay personas de más de 70 años dinámicos, autosuficientes física e intelectualmente, que llevan una vida productiva y emotiva vigente. Por lo tanto no es aceptable que por el hecho de tener edad avanzada, sean un mueble viejo y en esto, los medios, publicistas y las redes deben ser mas consecuentes y no figurar al adulto mayor con baston en mano, sentado en un parque tirandole maiz a las palomitas o en una mecedora con gorrito y medias de lana. No, el adulto mayor debe ser representado como persona valida, porque esos años son de experiencia, sabiduría y templanza.
Desde luego, hay que entender que su cuerpo no es comparable con jóvenes 20 o 50 años menos, por lógica los tejidos y órganos se van desgastando y su vulnerabilidad es mayor. Esta es la razón por la cual el presidente sensatamente protege a esta población. Las estadísticas muestran que un 65% de muertes por Covid19, son de este sector poblacional por ser el más proclive al contagio, sus defensas son inferiores y el riesgo es mayor.
De manera que se puede ser viejo pero responsable, no abusar como algunos de edad avanzada, deambulando por la calle, solos sin tapabocas ni precauciones básicas entrando a supermercados, además ver a otros acompañados de alguien llevándole su botella de oxigeno. ¡La edad es símbolo de vida!