Carlos Holmes Trujillo | El Nuevo Siglo
Domingo, 19 de Octubre de 2014

CANDIDATOS JUGANDO DURO

¿Dilma? ¿Aécio?

 

EL  próximo 26 de octubresabremos si Dilma Rousseffseguirá siendo la Presidenta de Brasil. No la tiene fácil.

La campaña está como para alquilar balcón,toda vez que los sondeos muestran que hay un empate técnico entre ella y Aécio Neves, el candidato del Partido de la Social Democracia Brasileña, quien aspira a sucederla.

Los dos candidatos están jugando duro. Todo parece indicar que el objetivo es ganar la mayoría de la llamada “Clase C”.

Así se ha bautizado a un grupo de la población que está integrado por hogares que reciben entre 700 y 1.800 dólares al mes. Para seducir a ese sector que, según los analistas, representa cerca del 42% del electorado,  los aspirantes no están ahorrando ningún esfuerzo.

Dilma sigue acudiendo a la sombra protectora de los logros sociales de su antecesor y mentor, el expresidente Lula, gracias a los cuales cuenta con el apoyo de los más pobres. Pero no solamente eso.

Además de defender su propia gestión, resolvió convertir al expresidente Cardoso en uno de los blancos de sus ataques.

“Fuera, fantasmas del pasado” , dice la Presidenta, para combatir a Neves, con el argumento de que su elección representaría regresar a épocas impopulares caracterizadas por el aumento de los impuestos y la reducción del gasto.

Rousseff está lejos de encontrarse en una zona cómoda. La economía del Brasil está en recesión, las exportaciones han caído y el sector productivo padece una etapa de estancamiento.

Esta difícil situación tiene mucho que ver con la desaceleración de China, pero pone de presente, igualmente, serios problemas estructurales.

Y  los escándalos de corrupción, que afectan al Partido de los Trabajadores, la colectividad de la Presidenta, son una nube negra que incide negativamente en la percepción de los ciudadanos.

De otro lado, Aécio Neves no es ningún pintado en la pared. La política le corre por las venas. Aprendió a hacerla con su padre y con su abuelo materno, el expresidente Tancredo Neves.

Ha sido diputado federal en representación de Minas Gerais, miembro de la Asamblea Constituyente de 1986, gobernador del mismo Estado, senador , y en 2013 fue elegido Presidente del Partido de la Social Democracia Brasileña.  En distintas ocasiones obtuvo las más altas votaciones para llegar a los cargos de representación popular que ha ocupado y se le reconocen su carisma y capacidad ejecutiva.

Como Gobernador le dio prioridad al mejoramiento de la calidad de la administración pública, la educación , la seguridad pública, la salud, la lucha contra la pobreza rural y al sector del transporte.

Se trata, pues, de un dirigente exitoso que ha demostrado una gran capacidad de movilización electoral durante su carrera pública. No se ha dejado enredar en los debates del pasado y ha preferido apostarle al futuro y a la esperanza.

Para nuestro hemisferio, en general, y para Colombia, en particular, lo que suceda en Brasil es de gran trascendencia. Se trata de un vecino que es la octava economía del mundo, cuya orientación hacia adelante recibirá la influencia del resultado de las elecciones.

Una victoria de Neves será un mensaje negativo para los países que comparten el proyecto del socialismo siglo XXI, y una buena noticia para los brasileros que rechazan el patrocinio al Foro de Sao Paulo.

Para Colombia, el triunfo de Aécio sería alentador.