CARLOS ALFONSO VELÁSQUEZ | El Nuevo Siglo
Domingo, 9 de Diciembre de 2012

Las estrategias para terminar el conflicto

Acometida  oficialmente la segunda fase de los “diálogos buscando terminar el conflicto armado” conviene mirar las estrategias que están ejecutando el Gobierno y las Farc buscando ponerle fin a la confrontación.

A estas alturas es evidente que la guerrilla le está apostando duro a lo político -buscando recuperar visos de legitimidad enterrada-, y muy poco a lo militar. Repasemos lo más reciente para corroborarlo. Recordemos que fue el pasado 19 de noviembre cuando al mismo tiempo en que el país recibía el “baldado de agua fría” del fallo de La Haya, las Farc anunciaban, sorpresivamente, una tregua unilateral de dos meses. ¿Solo coincidencia? Podría ser, pero no deja de llamar la atención la oportunidad política. Independientemente de los dudosos efectos sobre su imagen por el escepticismo acumulado, hay que ver las cosas en su realidad y ésta nos dicta que en momentos en que se inician de lleno “los diálogos” y empiezan a escucharse las propagandas anunciando la Navidad y las consabidas vacaciones de fin de año, fue la “única buena noticia” que conocieron los colombianos en ese día de ingrata recordación. 

Pocos días después vino el comunicado de la mesa anunciando la puesta en marcha del “primer espacio de participación en la Mesa de Conversaciones, mediante la convocatoria del Foro denominado Política de Desarrollo Agrario Integral (Enfoque Territorial)…”. Nótese que lo de “enfoque territorial” fue uno de los hilos conductores del tan criticado discurso de Márquez en Oslo. Y para cerrar las movidas del ajedrez político, al día siguiente las Farc le piden al Gobierno de EE.UU. que indulte a Simón Trinidad como contribución a la paz. Últimamente De la Calle quiso dejar claro que “la participación (ciudadana) es un insumo para la mesa, la participación está al servicio de la mesa, no la mesa al servicio de la participación”. A su turno la guerrilla dijo que “definitivamente la paz no podrá ser resultado de un diálogo alejado del pueblo de Colombia, de una decisión por las alturas, de imposiciones unilaterales de cualquier orden…”.  

¿Y lo militar? Según reciente informe del Centro Seguridad y Democracia en lo que más se están haciendo sentir las Farc ha sido en retenes ilegales que aumentaron un 124 por ciento en comparación con el año anterior. Es decir, lo militar complementando el propósito político.

Ahora bien, el Gobierno no parece estar interesado en impedir que la iniciativa política quede en manos de las Farc, y esto no es un buen augurio. Observemos algunas reacciones ante las iniciativas de las Farc. Al mismo tiempo en que el Presidente declara que hubo avances en la Mesa enfatiza en plazos perentorios para los diálogos. Cuando las Farc anuncian la tregua unilateral los que responden son el general Navas y el Ministro de Defensa para decir que son como el “pastorcito mentiroso”. Y simultáneamente continúan las operaciones militares en las que se priorizan los bombardeos que “producen resultados”. ¿Cuál es la prioridad estratégica del Gobierno?