Dilema de imagen y opinión
Santos se está complicando más de lo que necesita en su imagen pública; Hay 3 contextos que tienen su popularidad en vilo para el escenario reeleccionista.
Primero, su gobierno tuvo dos situaciones exógenas que le afectaron su imagen y que no se ha podido recuperar de ellas: la llamada reconstrucción por invierno y el fallo de La Haya.
Segundo, su popularidad estaba comprometida desde el comienzo por ser el siguiente presidente después de Uribe, el cual inevitablemente sería comparado con el exitoso período presidencial del exmandatario.
Tercero, tomó la bandera de la paz, la cual es impopular en el país en los últimos años, y mucho más aún después de los logro militares sobre los grandes cabecillas, que le dieron al país la sensación de que se podía vencer militarmente a las guerrillas. Estas tres situaciones tienen al Presidente a punto de no lanzarse a la reelección, para evitar perder el proceso de paz al que le apostó, a las que se les suma los paros que comenzaron desde el año pasado. Ahora se le agrega un problema más complejo: muchas personas comienzan a apoyarlo en su reelección públicamente y desafortunadamente no tienen el mejor favor del público, como el caso de Ingrid Betancourt y las mismas Farc; esto puede ser la estocada que termine de afectar el clima de opinión hacia su reelección.
La opinión pública está muy sensible en este momento y todo lo que se haga la afectará, seguramente bajo la premisa de que una buena acción del Gobierno en el buen sentir de la opinión pública, tendrá un efecto menor que una acción que no genere empatía, como el fenómeno de la prima de los congresistas. El Gobierno está contra la pared porque al final la percepción es la realidad en política y todo apunta a que se la están definiendo sus contendores; las declaraciones sobre crear una nueva operación militar contra cabecillas de la guerrilla puede tener réditos, mas muchos dirán que lo está haciendo para aparentar algo; a lo que se le suma que no han podido cumplir con lo que se comprometieron con las grupos del paro agrario y comienza el debate por el salario mínimo. ¿Cómo saldrá el Gobierno de esta situación? La verdad no es fácil porque perdió el vínculo emocional con el electorado y eso sólo se recupera con acto vinculante impresionante, y no parece que este esté en el horizonte.
Colombianada. A los políticos se les mide por sus errores y no por sus aciertos.
@consumiendo
*Presidente de Raddar