La población negra o afro descendiente que existe en el país, es una realidad que mal se haría en desconocerla. No hay la menor duda de que no existían en América los negros al momento de su descubrimiento por Colón y su colonización por los que después vinieron dizque a civilizarnos y a aventurar. La población indígena con todas características antropológicas propias así como comportamiento, individual (costumbres) y colectivo propios, fue utilizada para todas las actividades en la cuales se empeñaron los recién venidos. Las necesidades de mano de obra buena y barata, así como la existencia de colonias europeas en el mundo y particularmente en África, encontraron allá trabajadores que suministraba mano de obra barata y eficiente que podría ser sometida esclavizada y comercializada para otros mercados. La América recién descubierta fue una región propicia para el mercadeo de este bien cuya materia prima era la esclavitud.
La esclavitud humana, que es un concepto hoy por hoy absolutamente desconocido, inaplicable e incomprensible, fue una fuente de mercancía humana con el fin de obtener mano de obra para complementar o substituir a la que se encontró en las regiones de América recién descubierta. Esta parte del continente que se llama Colombia, no estuvo exenta al fenómeno de la esclavitud que llegó a nuestro país embarcada y comprada para su reventa en el destino final en América. Hoy los negros o afro descendientes, que así llegaron a nuestro territorio, son ciudadanos colombianos con todos los derechos y obligaciones de todos los demás colombianos. Nuestra Constitución en uno de sus artículos, en términos elocuentes y emocionantes, que lindan con la poesía, establece como principio que en Colombia no existe la esclavitud y que todo ser humano que en esas condiciones pise su territorio inmediatamente será libre.
La presencia de los afro descendientes ha sido siempre objeto de estudios y análisis; en año de 1759 se realizó un censo de ellos, con todas las dificultades que es de suponer existían en la ápoca que pretendió saber cuántos habitaban en el Chocó, departamento por excelencia habitado en su inmensa mayoría por ellos. En la época eran esclavos y así eran tratados. Un concienzudo estudio de un estudioso de estos temas, Sergio Mosquera, se ocupó de identificar los orígenes africanos de la población de El Chocó según el censo mencionado. Con ese propósito se ocupa de identificar las regiones de África de donde provenían los esclavos así como sus características. Senegambia, Costa de Oro (25,6%), Golfo de Benín (21,5%), Golfo de Biafra, África Central (19%) y Costa de la Pimienta son las regiones africanas identificadas, así como el porcentaje de ellos en el Chocó; el tipo de seres humanos en cada una de ellas está descrito. También los grupos étnicos en cada una de estas zonas como son, Arara, Canga, Carabalí, Cetre, Chalá, Chamba; Congo y o identificadas por sus lenguas. Buena aproximación a los ancestros.