La actividad edificadora sigue consolidándose como uno de los grandes jalonadores de la economía y el empleo en el país, tanto en vivienda como en destinos no residenciales.
Así lo confirman las cifras de Coordenada Urbana, el sistema geo-referenciado de Camacol, al reportar que las ventas de vivienda nueva en Colombia sumaron $ 13,5 billones de pesos durante los primeros seis meses del presente año, manteniendo los mismos niveles del primer semestre de 2014, y reflejando una dinámica positiva en todo el país.
Antioquia, Bolívar, Atlántico y Valle, son las cuatro grandes ciudades que más aportaron a este crecimiento, mientras que en ciudades intermedias se destacan Boyacá, caldas, Cúcuta, Huila y Villavicencio.
La presidente de Camacol, Sandra Forero Ramírez, destacó la dinámica tanto del segmento VIS como del no VIS. En el primer caso, hay que decir que de las 81.337 unidades de vivienda nueva que compraron los colombianos en el primer semestre del año, 33.000 correspondieron a Vivienda de Interés Social (VIS). En el segmento no VIS el crecimiento fue de 5 % al pasar de 45.908 unidades a 48.260.
PIPE 2.0 impactará de manera positiva
Frente al panorama que se vislumbra para el sector, la Presidente de Camacol destacó que “la cobertura a las tasas de interés para el segmento de clase media, en el marco del PIPE 2.0, tendrá un impacto favorable sobre el sector. “Calculamos que el estímulo de 2.5 puntos porcentuales que ha propuesto el gobierno impulsará un aumento de 25 % en las ventas de vivienda nueva, cuyo valor oscila entre 87 millones y 216 millones, durante los próximos dos años (es decir 12,5 % por año). Esto permitiría llegar en el 2017 a niveles de venta superiores a las 69.000 unidades anuales en este rango.