Gabriel Sonny Cubillos

Periodista EL NUEVO SIGLO

Antes de junio próximo la Cámara de Representantes evacuaría en sus dos últimos debates el proyecto que instituye el Día Nacional de la Tolerancia, la Solidaridad y la Convivencia, el cual busca además  de que el país se ponga a tono con la resolución de la Unesco en este sentido, servir como una herramienta más en la reconstrucción del tejido social a partir de la firma de la paz.

La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) estableció desde 1995 el Día Internacional para la Tolerancia a conmemorarse cada 16 de noviembre “con el compromiso de fomentar el bienestar, la libertad y el progreso de los seres humanos en todas partes, así como de alentar la tolerancia, el respeto, el diálogo y la cooperación entre diferentes culturas, civilizaciones y pueblos, los jefes de Estado y de Gobierno”.

En ese sentido el proyecto de ley No. 184/15 Cámara, 118/14 Senado tiene por objeto promover e institucionalizar en Colombia el Día Nacional para la Tolerancia, la Solidaridad y la Convivencia, aprobada y firmada por los Estados Miembros de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura y, en concordancia, con el preámbulo de la Constitución Política de Colombia.

La iniciativa la radicó en el Parlamento el senador Antonio Guerra de la Espriella en noviembre de 2014, logrando que fuera aprobada en primer debate por la Comisión Segunda del Senado en mayo pasado. Posteriormente, en septiembre, la plenaria de esta misma Corporación también le dio luz verde.

Ahora la iniciativa espera recibir su primer debate en la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes a partir del 16 de marzo venidero.

A pesar de que este proyecto ha contado con receptividad en las bancadas de los diferentes partidos, como lo demuestra su aprobación en el Senado de la República, debe cumplir sin dilaciones su trámite en la Cámara de Representantes en lo que resta de esta segunda legislatura, que acaba el 16 de junio, de lo contrario se hundirá por tiempos.

El proyecto pretende que en todas las instituciones del Estado, las organizaciones civiles y sociales, la comunidad y la familia se promueva y consolide una cultura de tolerancia, solidaridad y convivencia para vivir en paz.

Con el fin de lograr la efectividad de esta ley, el proyecto establece que  los funcionarios, servidores públicos y trabajadores de la administración pública, en cabeza de los Ministerios, Departamentos Administrativos, entidades del Estado del orden nacional y/o territorial, además de las organizaciones privadas que desempeñan funciones públicas como empresas particulares, celebrarán el Día de la Tolerancia, la Solidaridad y la Convivencia, desarrollando eventos, actos y actividades alusivas a esta fecha y sus principios que lo fundamentan.

Además, la familia como núcleo fundamental de la sociedad, las comunidades organizadas en juntas comunales, sociedades de pensionados, mutuales, cooperativas, viviendas de propiedad horizontal, grupos étnicos, iglesias y demás formas de organización social, celebrarán por medio de actos culturales, conversatorios alusivos a dicha fecha, encuentros deportivos y demás formas que consoliden el tejido social, este día.

Finalmente, la iniciativa busca que en todas las instituciones de educación formal como escuelas y colegios se celebrará el día 16 de noviembre de cada año el Día de la Tolerancia, la Solidaridad y la Convivencia mediante actividades que promuevan de manera interna y externa los principios que fundamenta esta iniciativa. Y se invita a las universidades que dentro de su autonomía promuevan de manera interna y externa los principios que fundamenta esta iniciativa.

¿Una fecha más?

El senador Guerra dijo a EL NUEVO SIGLO  que la iniciativa pretende “primero, recoger la resolución de la Unesco, por eso se fija el día 16 de noviembre, que es cuando se firmó el acta de creación de la Unesco; y segundo, este país necesita mucha solidaridad y mucha tolerancia. En estos tiempos hay que invocar estas dos circunstancias para que haya una mejor convivencia pacífica en el país y hacerles ver a las instituciones  con alcaldías, gobernaciones y otras entidades del Estado, la manera como ellos pueden ese día anualmente hacer unos actos cívicos y culturales para la conmemoración respectiva”.

El Congreso ya ha aprobado otras leyes para que el país se ponga a tono con resoluciones de la ONU, como fue la decisión de ésta de adoptar el 20 de noviembre como el Día Internacional del Niño.

El Parlamento colombiano aprobó la Ley 724 que institucionaliza el Día de la Niñez y la Recreación, en el último sábado de abril de cada año.

En ese sentido el senador Guerra espera que de institucionalizarse el Día Nacional de la Tolerancia, la Solidaridad y la Convivencia, no se quede como una fecha más de celebración sino que “aspiramos a que el ministerio correspondiente, incluso la Federación de Municipios y la de Gobernadores estén atentos” a la promoción de la misma.

La intolerancia es una de las manifestaciones que más muestra la necesidad de reconversión como sociedad.