Los colombianos ya pueden preparar los festejos por el inminente fin del largo conflicto armado, considera la guerrilla de las FARC, tras el pacto que alcanzó con el gobierno y que garantiza el cumplimiento del acuerdo de paz en vías de firmarse en Cuba.
El grupo rebelde exaltó el compromiso anunciado la víspera en La Habana que blinda jurídicamente el futuro acuerdo de paz a la luz de las normas constitucionales y el derecho internacional.
Con esto "los colombianos debemos alistarnos para entrar en una nueva era de reconciliación (...), debemos por tanto iniciar desde ya los preparativos de la gran fiesta nacional por la paz", señalan las FARC en un comunicado leído a la prensa por Iván Márquez, jefe del equipo negociador.
Tras cinco décadas de enfrentamiento que deja millones de víctimas entre muertos, desplazados y heridos, las FARC dijeron que el compromiso sobre garantías jurídicas acerca al "acuerdo final" al cabo de tres años y medio de negociaciones.
Las partes, que ya fracasaron en su intento de firmar la paz el 23 de marzo, como se habían comprometido, no han definido una nueva fecha para la suscripción del acuerdo.
De complejo contenido jurídico, el convenio anunciado el jueves incorpora a la Constitución colombiana el futuro acuerdo de paz con las FARC y lo ajusta a las normas del Derecho Internacional Humanitario, a través de un trámite que el Congreso debe iniciar en breve.
De esta forma, en teoría, lo pactado no podrá ser incumplido ni modificado, lo que atiende una de las exigencias de la guerrilla para dar el paso definitivo hacia su desarme y transformación en partido político.
Al mismo tiempo allana el camino hacia el cierre de lo dos últimos puntos actualmente en discusión: el cese bilateral y definitivo del fuego, que incluye la dejación de armas por parte de las FARC, y el mecanismo para refrendar los acuerdos.
Sobre este último punto, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) insistieron este viernes en que "habrá un mecanismo que garantice que los colombianos tomen sus decisiones en conciencia sobre lo pactado".
Sin embargo, no aclararon todavía el método de consulta que están dispuestas a apoyar, tras rehusar por años los planes del gobierno de someter a plebiscito los acuerdos de paz.
La Constitución de Colombia prevé varios mecanismos a través de los cuales los electores pueden pronunciarse sobre una decisión del gobierno (plebiscito), asuntos de interés nacional o local (consulta popular) o aprobar o derogar una ley (referendo).
El jueves, desde La Habana, el jefe negociador del gobierno, Humberto de la Calle, también destacó que el acuerdo jurídico es "sumamente importante" para la consolidación de las negociaciones de paz.