El tratado de Libre Comercio con la Unión Europea (UE) fue firmado ayer en Bruselas, Bélgica, por el Gobierno colombiano, que lo considera un gran avance para la economía colombiana y la política comercial del país.
El Ministro de Comercio, Industria y Turismo, Sergio Díaz-Granados, y el Comisario de Comercio de la Comisión Europea, Karel De Gucht, firmaron el acuerdo, calificado por el Gobierno como el segundo hito más importante de la agenda comercial en la historia colombiana.
“Podemos decir que se ha alcanzado un hito relevante en el camino de establecer el libre comercio como la regla entre nuestro países. Hoy nuestros gobiernos envían una señal clara a los inversionistas, a los empresarios para que eleven sus expectativas y sus aspiraciones, así como para que todos los ciudadanos tengan más optimismo en el futuro”, indicó el ministro Díaz-Granados.
El alto funcionario agregó que un acuerdo comercial crea certidumbre, transparencia, predictibilidad en las reglas, así como un sólido cimiento de confianza sobre el cual podrá construirse una comunidad más sólida y más próspera.
De acuerdo con la información oficial, la integración comercial con el más grande y exitoso bloque de integración de la era moderna, como es la UE con sus 27 países, representa para Colombia el inicio de una nueva era de crecimiento de la economía, reflejado en más empleo, menos pobreza y más calidad de vida para los colombianos.
“Es en el fortalecimiento de nuestras relaciones económicas, una forma de garantizar la paz y de hacer frente común en los objetivos de reducción de pobreza, generación de empleo y construir una mejor protección del medio ambiente. Es un momento de gran trascendencia para Colombia porque sellamos con este acuerdo nuestra relación con el más grande y exitoso bloque comercial en la era moderna. La Unión Europea es el segundo destino de nuestras exportaciones; nuestro intercambio superó más de 16.000 millones de dólares en 2011, el 15 por ciento de nuestras exportaciones”, explicó Díaz-Granados.
Efectos
Pero no todos comparten el optimismo gubernamental. “Este acuerdo colmará de beneficios y garantías a las empresas del Viejo Continente, particularmente a las españolas. El resultado será un mayor recorte de los derechos a trabajadores, empresarios, campesinos y ciudadanos en general. Todas las acciones que adelanta el Gobierno se orientan a privilegiar a las empresas transnacionales, mientras se aumenta el sufrimiento, las condiciones de vida son cada vez más difíciles y el trabajo cada vez más precario para los colombianos”, consignaron en un comunicado conjunto organizaciones como la Red Colombiana de Acción Frente al Libre Comercio (Recalca), la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Federación Colombiana de Educadores (Fecode), la Confederación General del Trabajo (CGT), la Organización Colombiana de Estudiantes (OCE), la Asociación Nacional por la Salvación Agropecuaria, la Organización Nacional Indígena de Colombia (ONIC) y la Asociación de Cabildos Indígenas del Norte del Cauca (ACIN).
¿Qué sigue?
El paso a seguir ahora es presentar el Acuerdo al Congreso para la aprobación y posteriormente pasa a revisión de constitucionalidad, para que el Presidente lo ratifique.
El trámite de aprobación interna en Colombia puede durar hasta dos años. Y en el caso de la UE, el Acuerdo debe ser avalado por el Parlamento Europeo (PE), además de la respectiva aprobación interna en los Estados Miembros, en caso de que la Comisión y el Consejo de la UE determinen que se trata de un Acuerdo de naturaleza mixta, por incluir temas de competencia de dichos Estados.
Derechos humanos y sindicales
Hace 15 días la plenaria del PE aprobó una resolución en la que se pide a Colombia y Perú definir una hoja de ruta para garantizar la protección de los derechos laborales, el medioambiente y los derechos humanos en el proceso de ratificación del TLC.
Esta resolución es el producto de la controversia levantada en el seno del PE en torno a la ratificación de este Acuerdo. No obstante, organizaciones de la sociedad civil manifiestan su insatisfacción con los términos de esta resolución ya que, entre otras cosas, consideran que carece de mecanismos vinculantes que garanticen el desarrollo sostenible en relación con el TLC.
El director del departamento de asuntos jurídicos y legislativos de la CUT, Hernán Trujillo, expresó que en Colombia se siguen cometiendo múltiples violaciones a la libertad sindical. “Solamente en lo que va de este año se han asesinado siete sindicalistas, y han aumentado las amenazas contra dirigentes sindicales”.
Trujillo recordó que un plan laboral semejante definido previamente con Estados Unidos para firmas ese otro TLC no ha significado ninguna mejoría. Por el contrario, dijo, “estamos seguros que los impactos de este acuerdo empeorarán la situación”.
Para el diputado Jürgen Klute, del partido Izquierda Unitaria Europea, “esta medida no cumple con las mínimas condiciones para contribuir eficazmente a una mejoría en materia de derechos humanos, medio ambientales y laborales e insiste en que debería ser aplicada y su impacto evaluado, antes que el Parlamento se pronuncie sobre la ratificación del Tratado”.