Un tratado de homologación de penas con otros países sería una solución a futuro para repatriar nacionales condenados, por razones humanitarias o porque recibieron sanciones que no están contempladas en nuestra legislación, como la pena de muerte y la cadena perpetua. Así lo señaló ayer en el Congreso el ministro de Justicia, Yesid Reyes.
En el marco de un debate de control político que se adelantó en la Comisión Segunda de la Cámara de Representantes, el titular de la cartera de Justicia dijo que “Colombia no puede ejecutar penas que no existen en nuestra legislación, como es la cadena perpetua o la pena de muerte. No podemos repatriar a un colombiano condenado a pena de muerte para matarlo en Colombia ni traerlo para imponerle cadena perpetua porque esto es inconstitucional”, aseguró.
Añadió que “cuando se firma un tratado se puede pactar la homologación de penas y en la medida en que se logre hacer con varios países se puede evitar este problema, pero eso es una solución a futuro. Como no existe un tratado de equiparación de penas, tendríamos que esperar a que se solicite, como en efecto se ha hecho, se negocie, se firme y entre en vigor”, expresó.
En cualquier caso, Reyes Alvarado dijo que esta es una opción a largo plazo que “no solucionaría el problema que existe hoy con países como China y Qatar”.
El Ministro enfatizó a los parlamentarios presentes en este debate de control político citado para conocer qué ha hecho el Gobierno nacional en casos puntuales como el de Juan Pablo Iragorri, quien fue condenado a cadena perpetua por la justicia de Qatar por cargos de narcotráfico; al igual que 12 colombianos condenados a similar pena en China, que el Estado colombiano no puede intervenir en los asuntos internos de los diferentes países, razón por la cual cada Nación es soberana para establecer las reglas de juzgamiento en su territorio. “No hay ningún Estado que tenga la potestad de modificar sentencias de procesos adelantados en otros países”, dijo.
El Ministerio de Justicia informó que actualmente Colombia limita su política de repatriación, por consideraciones de carácter humanitario, a enfermedad grave de la persona sentenciada o su familia, edad superior a los 65 años o estado de invalidez del interno.
Hasta el año 2014, esta cartera autorizó 1.333 repatriaciones (que equivale al 98 por ciento de las solicitudes) de Costa Rica (27), Ecuador (404), España (220), Panamá (557), Venezuela (56), México (26), Perú (40), Italia (2) y China (1).
Indicó la cartera de Justicia que actualmente hay más de 13 mil colombianos en cárceles de todo el mundo.
Repatriación
En la Comisión Segunda de la Cámara, la ministra de exteriores, María Ángela Holguín, dijo que la Cancillería ya envió a Qatar y China solicitudes para la repatriación de los nacionales que allí fueron condenados a cadena perpetua por cargos de narcotráfico.
“Le hemos mandado notas, en el caso de China a la Cancillería, reiterándole que en Colombia no existe la pena de muerte, que le pedimos que estudien la posibilidad de un cambio de pena, esas han sido unas 4 o 5 notas que le hemos mandado”, expresó la ministra Holguín.
En tanto que sobre el caso de Juan Pablo Iragorri, dijo la Canciller que “le hemos preguntado ya al gobierno de Qatar si ellos tienen tratado de repatriación de presos, estamos esperando la respuesta; yo estuve hablando con el Canciller de Qatar y considerando la posibilidad de ir y hablar de este tema”.
Holguín dijo que el Estado no ha dejado solo a Iragorri. “Más o menos ha habido 14 visitas del cónsul, él no está en Qatar, está en Abu Dabi (…) el trabajo consular consiste en que nosotros debemos garantizar el derecho de las personas, el señor Iragorri tenía un abogado”.
“Estoy más que dispuesta a ir y hablar con el Canciller de Qatar, pero también somos respetuosos de las decisiones soberanas de un Estado. Estamos dispuestos a estudiar un tratado de repatriación de presos pero hasta el momento no hemos recibido respuesta”, concluyó Holguín.