La coalición antiyihadista liderada por Estados Unidos apoyó en París el plan militar y político de Irak para reconquistar sus territorios tomados por el grupo Estado Islámico (EI) y abogó por un "proceso político" en Siria bajo la égida de la ONU.
Es un "buen plan, militar y políticamente", para intentar reconquistar la provincia de Al Anbar, en el oeste de Irak, declaró el subsecretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, tras una reunión de la coalición antiyihadista para analizar su estrategia.
Por su parte el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, declaró que existe una "total determinación" en la lucha contra el EI, que constituye "un combate de largo plazo".
En el plan adoptado por el gabinete del primer ministro iraquí Haider Al Abadi, el gobierno de Bagdad espera movilizar a las tribus sunitas de la provincia de Al Anbar, y asegurarse que las milicias chiitas operan bajo la autoridad del gobierno, para evitar tensiones confesionales.
En una declaración común, la veintena de países y organizaciones reunidos en París para debatir su estrategia contra los yihadistas expresaron su "firme apoyo a esta plan" de urgencia de Bagdad para la liberación de la provincia de Al Anbar controlada por el grupo EI.
Por otra parte, los miembros de la coalición internacional llamaron "al pronto lanzamiento de un verdadero proceso político inclusivo, bajo el auspicio de Naciones Unidas" para restablecer la paz en Siria.
Este proceso se apoyará sobre principios ya determinados por la comunidad internacional pero nunca concretados, a saber la creación de un gobierno provisional que incluya representantes de la oposición y del régimen actual.
En su declaración común, los países y organizaciones presentes en París señalaron también "la incapacidad y la falta de voluntad de régimen (sirio) de Bashar al Asad para luchar contra Daesh" (acrónimo árabe del Estado Islamico).