Aunque el sector cafetero de Colombia ha trabajado políticas para ser cada día más competitivos, el cambio climático se ha convertido en un verdadero reto para los productores, quienes ahora le apuestan a una caficultura “climáticamente inteligente”. 

 

 

 

Así lo manifestó a EL NUEVO SIGLO, el presidente de la Federación nacional de cafeteros, Luis Genaro Muñoz, afirmando que los excesos de fenómenos de Niña obligan a repensar y a pensar en una agricultura de precisión y más aún con la apertura de nuevos mercados. 

EL NUEVO SIGLO: ¿Cómo fue la producción de café este año?

LUIS GENARO MUÑOZ: La producción se afectó duramente este año. El invierno trae exceso de lluvias, no hay floraciones y la cosecha desaparece. Además, hay exceso de nubes que disminuyen el brillo solar en un 25 por ciento, lo cual impacta en la producción. 

ENS: ¿Qué están haciendo para mejorar la situación del sector?

LGM: Estamos invirtiendo en el futuro, hoy tenemos en Colombia 200 mil hectáreas que están entre cero y dos años de edad, es decir, que no están produciendo café, pero están renovadas en variedades resistentes a los cambios climáticos, cuya producción veremos en unos años. 

 

 

 

ENS: ¿Cuál será el lema para los próximos años?

LGM: “Caficultora climáticamente inteligente”, eso quiere decir prepararnos por cada uno de los microclimas para hacer acertadamente los cultivos,  variedades, fertilización, prácticas de siembra, manejo de sombrío y protección de suelo. 

 

 

 

ENS: ¿De qué se trata esa nueva visión?

LGM: Hemos trabajado políticas que le han servido de forma exitosa a la caficultora colombiana, pero el cambio climático que por ahora ha generado excesos de fenómenos de Niña, nos obliga a repensar y a pensar en agricultura de precisión y climáticamente inteligente. 

ENS: ¿Cuál es la meta?

LGM: La meta es crecer. Las técnicas de pronóstico funcionan bien en agricultura siempre que las condiciones de clima sean normales. Lo que si creo es que Colombia no disminuirá más en producción, a que ritmo la vaya recuperando dependerá de la oferta ambiental.

ENS: ¿Cómo va el tema de renovación de cultivos?

LGM: Este año llevamos 102 mil hectáreas y vamos a llegar muy cerca de 120 mil hectáreas, esto cambia la estructura y nos prepara mejor para el futuro. 

ENS: ¿Cómo los beneficiará el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos?

LGM: En el café particularmente no teníamos aranceles, lo importante era cuidar que no los pusieran. Siempre que la Colombia exporte más a los Estados Unidos, nuestro producto será más visible y los mercados más vigorosos. 

 

 

ENS: ¿Y la perspectiva frente a otros TLC?

LGM: Los vemos con optimismo. Los cafeteros tenemos, por ejemplo para Corea, aranceles del 8 por ciento, es decir que estamos por encima del precio de los demás cafés del mundo, aún así somos exitosos por la alta calidad, pero lo seremos más si no hay barreras arancelarias. 

ENS: ¿Cuáles son los retos?

LGM: La agricultura es una locomotora que va tomar cada vez mayor velocidad, el Gobierno y el sector privado están haciendo grandes esfuerzos para que ello ocurra, impulsando la investigación, programas de apoyo y créditos que nos preparar a un TLC. 

ENS: ¿Cuál es su perspectiva del crecimiento de la agricultura?

LGM: Si el tiempo hubiera ayudado, seguramente el Producto Interno Bruto (PIB) crecería más. Sin embargo, vencer el 3 por ciento en el PIB con invierno es retador. Apenas salgamos del clima, la locomotora marchará más rápido.