Funcionarios de la Defensoría del Pueblo pudieron constatar las difíciles condiciones en las que viven cerca de 40.000 personas de varios corregimientos de la Alta Guajira en la frontera con Venezuela.
La Defensoría del Pueblo hizo un urgente llamado a las autoridades nacionales y regionales para solucionar la hambruna que se vive en 13 corregimientos de la Alta Guajira, agravada por el cierre de la frontera de Venezuela, desde donde se abastecían de comida y elementos básicos.
La solicitud se hizo luego de que durante esta semana varios funcionarios de la Defensoría del Pueblo Regional Guajira realizaran una visita de verificación y acompañamiento a los 13 corregimientos de la Alta Guajira, en donde se estima que son unas 40.000 personas están en situación de hambruna.
La escasez de alimentos se vive en los corregimientos de Nazareth, Puerto Estrella, Puerto López, Porshina, Punta Espada, Castillete, Tawaira, Bahía Onda, Winpesi, Siapana, Tapajarin, Jonjoncito y la Flor del Paraíso, todos pertenecientes al municipio de Uribia. Este municipio tiene 130.000 ciudadanos, de los cuales 30.000 habitan el casco urbano y los otros 100.000 en zona rural de la Alta Guajira, la mayoría indígenas que pertenecen a la comunidad Wayuu.
Estas poblaciones están muy distantes unas de otras y por estar ubicadas en zona fronteriza con Venezuela han resultado muy afectadas luego de la decisión del gobierno venezolano de restringir la comercialización de alimentos hacia Colombia. Según el Gobierno de ese país, el 40 por ciento de la comida producida en Venezuela pasa a Colombia de manera clandestina.
Ante este panorama, la Defensoría del Pueblo solicitó a los gobiernos local y departamental tomar las medidas necesarias para superar esta grave situación que afecta a los cerca de 40.000 habitantes de las comunidades señalas, de los cuales el 70% son niños y mujeres.
Por último, reiteró el llamado al Gobierno Nacional para que se implementen políticas públicas responsables y coherentes que eviten la dependencia de los alimentos provenientes de Venezuela de los indígenas de la Alta Guajira.
A finales de enero, una líder indígena le manifestó a la Defensoría Regional La Guajira que en una comunidad cercana a Riohacha habían fallecido tres menores en un periodo de dos meses, producto de la desnutrición que está azotando a los niños. Según datos de la Secretaría de Salud departamental, en el 2013 fallecieron 23 personas en La Guajira por desnutrición.
En su reporte ante la Defensoría del Pueblo, la líder advierte que "son más los menores que mueren a causa de la desnutrición, solo que no son reportados ante las autoridades" ya que los indígenas son enterrados en cementerios familiares.
La Defensoría del Pueblo participó en el Primer Consejo de Política Social de carácter extraordinario, el pasado 23 de enero, en el que se propuso la asignación de 1.500 cupos más para la Guajira en la Estrategia Nacional de Cero a Siempre, para proteger a más menores de edad del departamento.