COMO NAIRO Quintana o Rigoberto Urán es como quiere Óscar Zapata, organizador del Gran Fondo Cannondale, que se sientan los bogotanos el próximo primero de junio, cuando en las cercanías de la capital de la República, se unan a esta carrera recreativa que se hace por primera vez en la región, tras haber pasado por Antioquia con una gran acogida y donde participaron más de 1.000 personas y para el segundo semestre habrá otra en la zona cafetera promovido por el ex ciclista profesional George Hincapié.

Esta prueba amateur de naturaleza no competitiva se ha hecho 17 veces en Italia y en las principales capitales del mundo, y el organizador nos contó que espera que haya llegado para quedarse.

EL NUEVO SIGLO: ¿Qué esperan de esta primera edición del Gran Fondo Cannondale?

Óscar Zapata:Que este primero de junio, cuando se realiza el evento desde las 7 de la mañana esperamos que la gente pase un rato agradable, con seguridad, que la familia los acompañe y que se sientan como profesionales para que rueden, midan su tiempo con los amigos, y que mejoren los tiempos que normalmente hacen. Es un sector por donde transita la gente entrenando y paseando los domingos.

ENS: ¿Cuánta gente espera ese día y cuál será el incentivo para que asista?

OZ: Esto no es un evento profesional ni una carrera como tal. Aquí no se mide tiempo, pero lo comparamos básicamente con la media maratón, donde la gente no va a ganarlo sino a medirse con sus amigos, a mejorar sus tiempos… Todo participante tiene una medalla de finisher (aquel que termina la prueba) y hay trofeo para los tres primeros en cada categoría, las cuales se reparten de acuerdo a la edad.  

ENS: ¿Cómo evalúa el nivel de acogida de estas competencias en otros países? ¿Qué experiencias les han dejado?

OZ:Los italianos entienden mucho de este tipo de pruebas, ellos son los padres del ciclismo en diseño de pruebas y demás. Ellos inventaron este formato, pues en Italia hay 17 grandes fondos en el año y todas las ciudades importantes en el mundo los tienen. Nueva York acaba de hacerlo el fin de semana que pasó, con victorias de colombianos en categoría hombres y en categoría mujeres y estuvimos muy bien representados por competidores amateur. También se hace en Miami y en Medellín, por lo que Bogotá no podía faltar teniendo su ‘gran fondo’.

ENS: ¿Qué personalidades importantes van a acompañarlos ese día en el Gran Fondo Cannondale?

OZ: Están viejas glorias del ciclismo colombiano como Henry Cárdenas, el famoso “Cebollita”, que corrió en Europa y es distribuidor de Cannondale, por lo que trabaja con nosotros. También estará la dinastía Wilches, con Pablo Wilches, su hijo Juan Pablo Wilches que ya es profesional corriendo Vuelta a Colombia, e incluso el nieto está metido ya en el ciclismo y nos van a acompañar también. Además van a estar algunos corredores profesionales del Movistar Team, quienes como empresa se vincularon con nosotros en el evento. Adicionalmente, como este es un evento muy recreativo, entonces estarán también empresarios, presidentes, gente importante… Ya los negocios no se hacen en un campo de golf sino encima de una bicicleta.

ENS: ¿Cómo será el recorrido en términos de distancia y dificultad?

OZ:‘Gran Fondo’ en este caso viene del italiano y quiere decir “Gran Distancia”. Es un recorrido de 180 kilómetros, que es perfectamente lo que hace un profesional en un Giro de Italia o en un Tour de Francia en una etapa. Tiene 3.500 puestos de ascenso, es un recorrido que arranca desde la ciudad de Sopó, pasa por Guasca, Guatavita, Sesquilé, Alto del Sisga, llegamos a Machetá, y regresamos otra vez a Sesquilé, de ahí a Guatavita, a Guasca y subimos a La Cuchilla. Ese es un punto que está a 3.300 metros de altura que es en la vía a Sueva, y de ahí nos devolvemos y retornamos a Sopó. Esa es la gran distancia de 180 km, hay otra de solo 90 kilómetros, y hay una que se llama Gran Turismo, que va quienquiera y es de 47 kilómetros.

ENS: ¿Por qué deben los bogotanos asistir al Gran Fondo Cannondale?

OZ:Los que montamos en bicicleta siempre en nuestros sueños queremos sentirnos como un profesional. No conozco a nadie que no se haya parado sobre los pedales subiendo alguna de nuestras montañas. Así se debe sentir un profesional, así es el esfuerzo que hace, estar en un lote de 300-400 personas es sentirse en una gran vuelta mundial. Nadie quiere que le cuenten eso, debe vivir la experiencia.