Cinco personas más han sido detenidas este lunes en Nueva York acusadas de haber participado en un "robo" informático internacional que hace meses permitió cosechar en pocas horas 45 millones de dólares en más de 20 países, indicó la justicia neoyorquina.
Estas cinco personas "eran miembros de la célula neoyorquina de una organización internacional de cibercriminalidad, que había usado métodos sofisticados para piratear los sistemas de instituciones financieras, robar datos de tarjetas de crédito prepagas y realizar extracciones fraudulentas en cajeros de todo el mundo", detalló la fiscal de Brooklyn Loretta Lynch en un comunicado.
Los acusados enviaron luego la mayoría de los fondos recaudados a los dirigentes de la organización, de los cuales 800.000 dólares por autobús en una maleta con destino a Florida (sudeste), precisó el texto.
El 9 de mayo, ocho personas ya habían sido inculpadas en este caso de robo virtual denominado "operaciones ilimitadas".
En los meses anteriores, los piratas habían violado los sistemas informáticos de entidades bancarias, pirateado los números y códigos secretos de tarjetas prepagas y luego eliminado el máximo de retiro permitido.
Estas tarjetas prepagas no están vinculadas a cuentas bancarias, sino que son ofrecidas por empresas y ONG.
Luego habían recodificado tarjetas magnéticas y, con los nuevos códigos, cómplices sacaron dinero a través de cajeros de todo el mundo de manera coordinada.
El 22 de diciembre de 2012, luego de haber entrado en la red de procesadores de tarjetas del banco Rakbank, con sede en Emiratos Árabes, habían podido de esta manera sacar dinero de más de 4.500 cajeros, robándose 5 millones de dólares en una veintena de países.
Los días 19 y 20 de febrero de 2013, siguiendo el mismo método, pero esta vez contra el Bank of Muscat, con sede en Omán, realizaron 36.000 extracciones y robaron 40 millones de dólares en 24 países.
La célula de Nueva York retiró 400.000 dólares el 22 de diciembre y luego 2,4 millones en febrero desde 140 cajeros y en 3.000 operaciones, según la hoja de acusaciones.
Unos 800.000 dólares fueron enviados en efectivo a Miami a un hombre que fue asesinado luego, Alberto Yusi Lajud-Pena, quien había huido a República Dominicana.
Los miembros de la red basados en Nueva york habían celebrado sus robos comprando relojes y vehículos de lujo./AFP