Las autoridades chipriotas bajaran recurrir a una ayuda bilateral, en vez de a la Unión Europea, para recapitalizar a sus bancos en dificultades, informó el gobernador del Banco Central.
"Si al final decidimos entrar (en un proceso de solicitud de ayuda) y no está decidido que lo hagamos, buscaremos las mejores condiciones posibles para la economía y éstas deben centrarse sólo en la consolidación del sistema bancario", dijo Panicos Demetriades a la prensa.
Varios bancos chipriotas están afectados por la crisis griega. Chipre se sumó a la UE en 2004 y al euro en 2008.
"Si un recurso eventual al mecanismo de apoyo solo tiene como objetivo el apoyo al sector bancario, creo que no tendrá consecuencias adicionales para el contribuyente chipriota y pienso que lo mismo ocurre con la ayuda bilateral", precisó.
La agencia de calificación financiera Moody's bajó el martes la nota de dos bancos chipriotas, el Bank of Cyprus y el Hellenic Bank, por "el riesgo creciente de la salida de Grecia de la zona euro".
La nota de un tercer banco, el Cyprus Popular Bank, está bajo vigilancia con vistas a una eventual revisión a la baja de su nota.
Todas estas notas son de categoría "especulativa", que corresponden a préstamos poco fiables.
El gobierno chipriota teme que pueda ser obligado a tomar medidas de austeridad si recurriera a Europa en busca de ayuda y tenga que renunciar a la tasa de imposición del 10% que aplica a las empresas, lo que podría provocar la salida de las compañías extranjeras instaladas en Chipre.
Los partidos de oposición urgen al gobierno del presidente Demetris Christofias a que pida ayuda a sus socios europeos lo antes posible para poder negociar condiciones favorables.
El diario progubernamental Haravgi dijo el miércoles que el gobierno trata de obtener un préstamo bilateral en vez de recurrir a la UE.
Aunque no precisó qué país o países podrían ayudar a la isla, se baraja que China sea uno de ellos después de que Rusia ha acordado un préstamo de 2.500 millones de dólares para cubrir las necesidades de financiación para 2012.
El portavoz del gobierno, Stefanos Stefanou, dijo que Nicosia estudia diferentes opciones y que no se ha tomado todavía ninguna decisión.
El gobierno chipriota ya ha apoyado un plan de recapitalización de 1.800 millones de euros para el segundo banco del país, Popular Bank, que es el más expuesto a la deuda griega.
Ni el gobierno ni los bancos privados pueden recurrir al mercado de la deuda desde hace un año debido a que la nota de Chipre está calificada como bono basura.