El Parlamento de Chipre aplazó hasta el martes la votación del rescate acordado por la Unión Europea (UE) y el FMI, que incluye un polémico impuesto excepcional sobre los depósitos bancarios, que inquieta a los mercados y suscita amplio rechazo en la isla.
Pese al aplazamiento, centenares de personas se congregaron ante el parlamento clamando "¡no al euro!", o "Europa existe por sus pueblos, no por Alemania"
Se trata de la segunda postergación desde el sábado de esta votación sobre el plan, que prevé tasas de hasta casi el 10% sobre los depósitos bancarios.
Para evitar retiradas masivas de fondos, los bancos de Chipre permanecerán cerrados hasta el jueves, indicó el lunes a la AFP una fuente del Banco central. Los bancos permanecen cerrados --este lunes fue feriado-- desde que se acordó el plan de rescate, la madrugada del sábado con la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La zona euro y el FMI acordaron la madrugada del sábado un plan de rescate de 10.000 millones de euros para Chipre, a cambio de la imposición de esa tasa excepcional sobre los depósitos bancarios en la isla, que suscita un amplio rechazo entre los chipriotas y en varios partidos políticos del país.
Esas tasas son de 6,75% para los depósitos bancarios de menos de 100.000 euros y de 9,9% cuando superan esta suma. La medida debe permitir recaudar unos 5.800 millones de euros.
Sin embargo, el ministro chipriota de Finanzas Michalis Sarris y el gobernador del Banco central Panicos Demetriades explicaron el lunes que buscaban una forma de imposición de depósitos bancarios menos severa para los pequeños ahorristas.
Los ministros de Finanzas de la zona euro mantendrán este lunes una teleconferencia para debatir esa nueva propuesta de Chipre, que prevé reducir la carga que tienen que pagar los pequeños ahorristas.
La medida de imponer los depósitos bancarios --tanto de chipriotas como de residentes extranjeros-- suscitó críticas no solamente en la isla mediterránea.
"Hay que decirlo francamente, esto parece una confiscación de fondos extranjeros. No sé quién tuvo esa idea, pero eso es lo que parece", declaró el lunes el primer ministro ruso, Dimitri Medvedev.
Poco antes, el presidente ruso, Vladimir Putin, entró en el debate declarando que "esta decisión, si se adopta, será injusta, no profesional y peligrosa", según el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
La agencia Moody's evaluó en 19.000 millones de dólares los activos de sociedades rusas colocados en Chipre, a los que se añaden 12.000 millones de dólares de haberes de bancos rusos en establecimientos chipriotas.
Por su parte, el primer ministro de Luxemburgo, Jean Claude Juncker, advirtió que el controvertido plan de rescate a Chipre puede generar una "pérdida de confianza, no solo de parte de los bancos sino también de la gente" en la zona euro.
El debate parlamentario del martes en Chipre se anuncia acalorado, ya que el plan de rescate fue criticado por los partidos AKEL (comunista), EDEK (socialista) y DIKO (centro-derecha), que suman 32 de los 56 escaños de la cámara.
"Si el acuerdo es rechazado entonces nos encontraremos muy probablemente fuera de Europa", aseguró el economista chipriota Simeon Matsi
El presidente chipriota Nicos Anastasiadis aseguró el domingo que pese a las duras condiciones, se trataba de la solución "menos dolorosa" para el país.
Otras condiciones del rescate son un plan de privatizaciones, y un aumento del impuesto de sociedades del 10% actual, el más bajo de la Eurozona, a 12,5%. Desde hace meses se viene acusando a Chipre de ser un paraíso fiscal y de no preocuparse mucho del origen de los fondos depositados en sus bancos, en particular rusos.
La medida sobre los depósitos bancarios causaba inquietud en los mercados financieros, temerosos de que la iniciativa se extienda a otros países en dificultades de la Eurozona.
Las bolsas europeas abrieron el lunes con fuertes bajas, aunque se fueron moderando durante la mañana. También bajo el influjo chipriota, Wall Street inició la jornada en baja.
AFP.