El Producto Interno Bruto (PIB) de Chile creció un 5,6% en 2012, impulsado por todas las áreas de la economía, salvo el sector agropecuario y silvícola, según un reporte del Banco Central, lo cual muestra una desaceleración de la economía chilena menor a la esperada por los especialistas.
"Durante el año 2012, la actividad económica anotó una expansión anual de 5,6%", señaló el BC en un informe difundido este lunes.
La tasa de crecimiento de 2012 es ligeramente más baja que la registrada en el año previo, que alcanzó el 5,9%, de acuerdo a las cifras revisadas por el BC.
El informe del BC muestra una "ralentización" de la economía chilena, pero en menor magnitud de lo que esperaban los especialistas ante la crisis en Europa, debido a las buenas cifras de la minería, que creció un 4,9% por un incremento de la producción de cobre, mineral del cual Chile es el mayor exportador, con un tercio de la oferta mundial.
"Estamos en una ralentización de la economía pero bastante menos de lo que se esperaba. Se esperaba que la situación general de la economía chilena estuviera más cerca del 5% que del 5,5%, pero el impulso de fin de año, sobre todo en la minería en temas de volumen fue importante en el último trimestre", dijo a la AFP Hernán Frigolett, economista de la Universidad de Chile.
El último año "el PIB fue impulsado por todas las actividades económicas, con excepción del sector agropecuario-silvícola, que registró una caída" de 0,6%, por una leve contracción de la agricultura, explicó el instituto emisor.
En tanto, "servicios empresariales fue la actividad de mayor contribución al desempeño del PIB", junto a "comercio, servicios personales, minería y construcción".
En todo 2012, la demanda interna creció un 7,1%, liderada por el consumo, cuyo crecimiento fue impulsado principalmente por el gasto de los hogares. En tanto, Chile cerró el año pasado con una inflación de 1,5%, mínimo en nueve años, con una proyección de 3% para 2013.
Las exportaciones de bienes y servicios crecieron en 2012 un 1%, mientras que las importaciones lo hicieron en un 4,9%.
Para el 2013, Frigolett estima que Chile debería verse más afectado en sus exportaciones, debido a la crisis de Europa y un menor crecimiento de China, pero que no causaría una recesión, sino una desaceleración de su economía que crecería en torno al 4% y 5%, en sintonía con las previsiones del gobierno.
"La intensidad de la tendencia más negativa que viene de Europa y China probablemente nos va a decir si estamos más cerca del 4% o del 5% de crecimiento", afirmó Frigolett.
Chile cuenta con una economía muy abierta, tiene 22 acuerdos comerciales con 60 países, y el mercado al que accede con preferencias comerciales alcanza el 62% de la población mundial.
En cuanto a la crisis de la Eurozona, según Frigolett, Chile sentirá sus efectos con un retraso de seis meses, y estos incidirán en la "economía doméstica" del país a partir del segundo semestre del 2013.
Según el economista de la Universidad de Chile, la economía chilena se resentirá principalmente por la caída de las exportaciones, mientras que la ocupación crecerá "a tasas decrecientes", y el desempleo "se estabilizará".
El país cerró 2012 con una tasa de desempleo de 6,4% y la desocupación bajó a 6% entre noviembre y enero, un mínimo en tres años.