Traicionado por su ambición de protagonizar una película, Joaquín "El Chapo" Guzmán, el capo más buscado del mundo hasta su recaptura del viernes, regresó a la cárcel de la que se escapó hace seis meses en medio de llamados para extraditarlo a Estados Unidos.
El narcotraficante especialista en construcciones de túneles para el trasiego de drogas y escapes, fue aprehendido por segunda vez en una carretera de la costeña ciudad de Los Mochis, Sinaloa (noroeste), su tierra natal, tras evadir un choque entre militares y sus pistoleros que dejó cinco presuntos delincuentes muertos.
Corriendo por el sistema de drenaje de Los Mochis, "El Chapo" fue finalmente detenido en compañía de su jefe de seguridad, Orso Iván Gastelum, y trasladado en helicóptero al penal El Altiplano, ubicado a 90 km de la capital mexicana.
De esa cárcel considerada de máxima seguridad escapó la noche del 11 de julio por un túnel con entrada en la regadera de su celda, cavado durante meses, con una extensión de más de 1,5 km que recorrió en minutos a bordo de una motocicleta adaptada para rieles.
- Aspiraba inmortalizarse -
A seis meses de esa fuga que representó una dura humillación para el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, el capo fue recapturado en parte por su deseo de inmortalizarse en la pantalla grande.
Un "aspecto importante que permitió precisar su ubicación, fue el haber descubierto la intención de Guzmán Loera de filmar una película biográfica", dijo la fiscal Arely Gómez, que detalló que incluso Guzmán había contactado actrices y productores.
"Incluso, las tareas de seguimiento permitieron documentar los encuentros entre los abogados del ahora detenido y estas personas", dijo la fiscal.
Fugado también en 2001 de una cárcel de Jalisco en un carrito de lavandería, la caza de "El Chapo" comenzó a cristalizarse cuando las fuerzas de seguridad lo ubicaron en una casa de Los Mochis, vigilada desde hace un mes.
Y fue en ese sitio donde se desató la mortal balacera, durante la cual Guzmán y su jefe de seguridad echaron mano de sus conocimientos de pasadizos del drenaje de Los Mochis.
Perseguidos por marinos, salieron por una alcantarilla, robaron un automóvil y tomaron una carretera donde fueron interceptados por los militares.
Con esa misma estrategia, "El Chapo" logró escapar en 2014 de un operativo en la cercana ciudad de Culiacán, pero en esta ocasión los marinos contemplaron esa posibilidad, explicó la fiscal.
- Solicitud de extradición -
"Misión cumplida: lo tenemos", escribió en Twitter el presidente Enrique Peña Nieto el viernes.
El mandatario fue ridiculizado con la fuga del capo, quien contó con la presunta colaboración de una docena de custodios y policías federales.
En Estados Unidos las reacciones no se hicieron esperar.
"Dado que 'El Chapo' ya se ha escapado dos veces de prisiones mexicanas, esta tercera oportunidad no puede ser desaprovechada", dijo el senador republicano y precandidato de su partido a la Casa Blanca Marco Rubio.
El gobierno del presidente Barack Obama congratuló a las autoridades mexicanas pero no se pronunció sobre una eventual extradición, aunque una solicitud había sido emitida en junio pasado.
Guzmán enfrenta cargos en unos seis estados de Estados Unidos por tráfico de drogas.
"La gran pregunta no es si lo van a extraditar, sino cuándo lo harán", dijo Alejandro Hope, un experto en seguridad y exfuncionario del servicio de inteligencia mexicano.
Ya fugado de El Altiplano, "El Chapo" y su defensa lograron obtener un amparo para evitar su extradición, pero después fue desechado, aunque pueden volver a solicitar otro.
Una fuente del gobierno federal dijo bajo anonimato a la AFP que "no pueden llevarlo de imediato" a Estados Unidos, al menos no antes de que un juez mexicano revise el caso.
La cancillería tiene la decisión final sobre cualquier extradición.
Pero el senador mexicano Miguel Barbosa, líder del opositor Partido de la Revolución Democrática (PRD, izquierda), consideró que el narcotraficante debe pagar por sus crímenes en México.
"Lo más fácil sería extraditar rápidamente a 'El Chapo", pero una vez más el Estado mexicano demostraría que no tiene la fuerza para castigar a aquellos que cometen crímenes en nuestro territorio", sostuvo Barbosa.