La intención de recortar las facultades de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Cidh), que se analizar en el marco de la Organización de Estados Americanos (OEA), sigue sumando voces críticas.
El turno le correspondió ayer al expresidente César Gaviria, quien en Washington, según un despacho noticioso de la AFP, acusó a Ecuador y a países aliados de querer amordazar a la Cidh.
"Los cambios que proponen limitarían drásticamente la autonomía", explicó el exmandatario en un artículo publicado en el Washington Post.
Los países "realmente comprometidos con los derechos humanos y la democracia deben defender a la Comisión" en la asamblea extraordinaria de cancilleres de la OEA este viernes, pidió Gaviria.
Las bases del plan de reforma de la Comisión prohíben la financiación fuera de la región, la elección de miembros de la Cidh de países no firmantes de la Convención y la exigencia de dar las mismas capacidades a todas las relatorías del ente, lo que equivaldría a debilitar la Relatoría Especial sobre Libertad de Expresión.
Un tercio del presupuesto de la Comisión proviene de Europa, recordó Gaviria, a causa del poco compromiso financiero de los Estados miembros, con excepción de países como Estados Unidos y Canadá. Prohibirle el acceso a otros fondos sería "devastador", indicó el expresidente.