Los centroafricanos votaron este domingo para elegir a su nuevo presidente entre dos candidatos, ambos ex primeros ministros, Anicet Georges Dologuélé y Faustin Archange Touadéra, con la esperanza de alcanzar la paz después de tres años de conflicto interno.
Una vez que la noche cayó sobre Bangui, los agentes electorales comenzaron a leer las papeletas iluminados por antorchas, mientras iban anotando en las pizarras de las salas de clase que sirvieron como recinto de votación.
Cerca de dos millones de electores estaban llamados a elegir presidente entre los dos candidatos, ambos de 58 años. La primera vuelta, en la que participaban 30 candidatos, se celebró el 30 de diciembre.
"Todo lo que queremos es seguridad para dar un nuevo impulso a nuestro país", dijo a la AFP Ndadder, un militar que esperaba para votar en el PK5, el barrio musulmán de Bangui, la capital de la República Centroafricana.
Las oficinas de voto quedaron abiertas una hora más de lo previsto, hasta las 16H00 GMT, dado que algunas habían comenzado a operar con retrasos.
El escrutinio de los votos comenzó inmediatamente tras el cierre, pero los primeros resultados demorarán varios días en conocerse, aunque el lunes alguno de los candidatos podría proclamar la victoria.
El jefe de la delación de observadores desplegada por la Unión Africana, Ousmane Ndéné Ndiaye, dijo este domingo que "desde el punto de vista de la organización, la contienda fue una victoria.
"Hubo menos errores" que en la primera vuelta, especialmente en la "disposición del material electoral", dijo el delegado a la televisión local.
Los electores, tanto musulmanes cono cristianos, de este país de 4,8 millones de habitantes, uno de los más pobres del mundo, se han inscrito masivamente en las listas electorales aunque pocos se atreven a hacer un diagnóstico sobre el resultado.
"Es una elección crucial, el futuro presidente reconstruirá nuestro país, esperamos mucho de él", dijo a la AFP Gaston, un habitante del barrio de Lakouanga.
Los dos aspirantes, dos técnocratas que han hecho promesas similares, tienen como prioridad la seguridad, la justicia y el desarrollo económico.
En marzo de 2013, la coalición de milicias rebeldes Seleka, mayoritariamente musulmana y liderada por Michel Djotodia, derrocó al presidente François Bozizé y abocó al país a un ciclo de violencia entre comunidades que culminó a finales de ese año con masacres a gran escala y el desplazamiento de miles de personas.
La operación militar francesa Sangaris expulsó a Seleka del poder y una misión de la ONU en el país (MINUSCA) intenta desde entonces mantener la paz y la seguridad.
- Nuevas elecciones legislativas -
Anicet Georges Dologuélé, uno de los aspirantes, es el favorito gracias a sus 23,78% de los votos en la primera vuelta y tiene el apoyo del partido de Bozizé (KNK) y de los círculos de negocios.
Su rival Faustin Archange Touadéra, sorprendió en la primera vuelta con 19,42% de los votos. Fue el último primer ministro de Bozizé y tiene el apoyo de parte de la base del KNK.
Estos comicios también sirvieron para repetir las elecciones legislativas del pasado mes de diciembre, que fueron anuladas tras registrarse numerosas irregularidades.
Un total de 1.800 candidatos competían por 105 escaños en la Asamblea Nacional.
Para evitar nuevos problemas, la Autoridad Nacional Electoral (ANE) ha puesto en marcha cursos de 48 horas para enseñar a los agentes electores como contar los votos o como levantar actas.
"Después de votar no se quede cerca del colegio electoral para crear tensión. Váyase a casa y evite el fraude", pidió el viernes la presidenta de transición, Catherine Samba Panza.
En los últimos meses la República Centroafricana ha vivido en una calma relativa y la primera vuelta se celebró sin incidentes. Sin embargo, por precaución, este domingo quedaron cerradas las fronteras terrestres y marítimas así como los comercios, bares y discotecas./AFP